Marina albiol. portavoz de IU en el parlamento europeo.

"Los CIE, como el de Algeciras, son prisiones para migrantes"

  • La política valenciana defiende la devolución de las inmatriculaciones de la Iglesia y carga contra el TTIP por el peligro para el campo andaluz

Acostumbrada a moverse por los pasillos de uno de los parlamentos más grandes del mundo, el Europeo, Marina Albiol (Grao de Castellón, 1982) cambió el pasado miércoles los mastodónticos edificios de Bruselas por los patios del antiguo Hospital de las Cinco Llagas. La portavoz de IU ante el legislativo comunitario quiso dar su apoyo a sus compañeros en la Cámara andaluza en el Pleno sobre la Ley de Memoria Democrática.

-¿Cómo puede una eurodiputada trasladar los problemas locales de Andalucía a Bruselas?

-Esa es precisamente nuestra labor. Lo hacemos mediante preguntas escritas a la Comisión y llevando los temas a las diferentes comisiones del Parlamento Europeo. También intentamos que tengan presencia directa allí, como cuando fueron los representantes de las almadrabas o la Plataforma Mezquita-Catedral de Córdoba. Nuestra función es abrir el Parlamento a los movimientos sociales porque muchas de las cuestiones que afectan a nuestra vida diaria se acaban decidiendo en Europa.

-¿Cuáles son las prioridades en Andalucía para su formación?

-Uno de los temas más importantes es la conexión ferroviaria de Algeciras-Bobadilla. Es un eje prioritario para Europa, pero el Gobierno central no tiene ni el presupuesto ni la voluntad política para electrificar esa vía en una provincia con una de las tasas de desempleo más altas del Estado español.

-En Algeciras también hay un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), que en IU quieren eliminar.

-La política migratoria también se decide en Europa y además del CIE de Algeciras, hay otro en Málaga. Defendemos el cierre porque entendemos que son prisiones para migrantes y agujeros negros de los derechos humanos.

-¿Cual es la postura del Parlamento en este sentido?

-Tristemente, se promueven el cierre de fronteras, las deportaciones, las redadas y todo lo que supone la llamada Europa fortaleza. Son políticas que pactan los socialdemócratas, los conservadores y los liberales, que defienden medidas criminales contra los migrantes y refugiados. Hay responsabilidad directa de las muertes que se producen en el Mediterráneo.

-¿Qué hay del polémico TTIP [el Acuerdo Transatlántico para el Comercio y la Inversión]?

-Va a arrasar con buena parte de nuestros derechos laborales y sociales. Las grandes corporaciones se van a situar por encima de gobiernos, parlamentos y el sistema jurídico, porque tendrán mecanismos que les permitirán incidir en nuestras legislaciones.

-¿Cómo puede afectar a Andalucía de forma más directa?

-El sector agrario sufrirá mucho. Es un acuerdo con Estados Unidos y su industria agroalimentaria está haciendo mucha presión para aprobarlo. Quieren llevarnos a su modelo, con grandes explotaciones. Una granja estadounidense es, de media, trece veces mas grande que una europea.

-¿Y respecto a las denominaciones de origen?

-En Estados Unidos no son más que una marca genérica. Para que aquí haya una denominación de origen se siguen unas normas muy estrictas y con el TTIP eso se puede acabar, porque se habla de igualar las normativas a la baja. Se podría comercializar vino de Oregón como si fuera un jerez.

-Las inmatriculaciones de la Iglesia son otro de los caballos de batalla de su partido que han ido a Bruselas.

-Defendemos que son un robo de patrimonio público y exigimos que sea devuelto. Es un privilegio hacia una determinada confesión religiosa y eso no tiene cabida en la Europa de las libertades. En el caso de la Mezquita de Córdoba entendemos que forma parte de la herencia cultural e histórica de Europa, de los valores de respeto a nuestra diversidad cultural.

-¿Cuál es el siguiente paso?

-La Comisión tiene que exigir al Estado español que todos esos bienes sean devueltos. Hemos trasladado el tema a varios eurodiputados y vamos a intentar que haya un debate en la comisión de Libertades Civiles, Justicia e Interior.

-IU forma parte del mismo grupo parlamentario que Podemos en Bruselas. ¿Podría trasladarse una situación similar a España?

-Creo que hacemos un trabajo que puede servir de ejemplo en el Estado español, aunque ya se está dando en algunas ciudades como Barcelona o Madrid. Estamos trabajando perfectamente en todos los temas en los que coincidimos.

-¿Hacia dónde va IU en todo este proceso?

-Hay que hacer una reflexión en toda la izquierda a nivel europeo porque no es el momento de replegarse tras las fronteras. Además, toca adaptarse a la nueva fase política que vive el Estado español. Necesitamos una organización más ágil y preparada para trabajar en estos espacios de confluencia.

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