Antonio González. Fisioterapeuta de la Federación Española de Hípica

"Hay caballos que se hacen los cojos para no trabajar"

  • "Algunos caballos se ponen a hacer ellos solos los movimientos o ejercicios de estiramiento que les hago cuando me escuchan llegar o me huelen"

Fisioterapeuta de la selección nacional de doma clásica, el jerezano Antonio González está en Kentucky, donde se están celebrando los Juegos Ecuestres Mundiales.

-¿Cuáles son sus funciones en el equipo español en Kentucky?

-Recuperación y tratamiento de las lesiones de los caballos del equipo durante la competición. También trabajo en la recuperación y tratamiento de los jinetes.

-¿Desde cuándo trabaja con la Federación Hípica Española?

-Desde 2009. Llegué tras haber tratado regularmente a los caballos de la selección en distintos concursos internacionales y por decisión del servicio veterinario de la selección de doma clásica.

-¿Cómo se especializa un fisioterapeuta en caballos?

-En España es complicado; sólo se puede hacer un máster en la Universidad Autónoma de Barcelona y tienes que especializarte en osteopatía equina en la Escuela Francesa.

-¿Qué es y como trabaja un fisioterapeuta de caballos?

-De la misma manera que uno de personas; es decir, después del diagnóstico del veterinario, trato a los caballos de las lesiones musculares, articulares... que se diagnostiquen. También hacemos una labor preventiva por medio de ejercicios de estiramientos, trabajos de recuperación, entrenamiento... Como en cualquier deportista.

-¿Cuáles son las lesiones o dolencias habituales de los equinos?

-Sobre todo problemas musculares como contracturas, ligamentos, tendones (tendinitis) y problemas articulares como bloqueos vertebrales.

-¿Qué nivel hay en Jerez y en España en la fisioterapia aplicada a la hípica?

-En general poco a poco se va extiendo la demanda del servicio de la fisioterapia equina, sobre todo en el mundo de los caballos de deporte. Podríamos decir que estamos todavía un poco lejos de países como Alemania, Holanda, Bélgica, Francia y Gran Bretaña, pero es cierto que cada vez son más las disciplinas deportivas donde se desarrolla esta actividad. De hecho, por ejemplo en los últimos años incluso se ha incorporado a la actividad médico veterinaria de los caballos de rejoneo.

-¿Hasta qué punto un buen fisioterapeuta mejora el rendimiento de los caballos?

-Pues como en cualquier atleta: prevención de lesiones, tratamientos de las lesiones acortando el tiempo de recuperación, preparación antes de la competición y recuperación después de la misma. Por ejemplo, en una competición como la de unos Juegos Ecuestres Mundiales, además del trabajo de los meses previos, durante la misma se interviene en el calentamiento del caballo con masajes y estiramientos antes de competir y después haciendo lo mismo para recuperar la fatiga y prevenir lesiones.

-¿Cómo es el trabajo en la Real Escuela?

-Es bastante gratificante, primero porque los servicios veterinarios han valorado la labor de la fisioterapia como modelo de medicina preventiva y terapéutica para muchos problemas musculoesqueléticos de los caballos, y segundo, por la facilidad, colaboración e interés que los jinetes y alumnos ponen a la hora de cuidar y mejorar la calidad de vida de los caballos de espectáculo.

-¿Con cuántos caballos trabaja?

-En principio mi función en la Real Escuela es atender a los caballos que los servicios veterinarios me indiquen, pero hay que pensar que son muchos los caballos que trabajan a diario tanto para los espectáculos como para seguir el aprendizaje de la doma académica. Hablo de que puede haber alrededor de cien caballos implicados en este programa de trabajo que ellos siguen. En la Escuela soy el único fisioterapeuta; en España somos pocos los que ejercemos realmente esta profesión, no creo que seamos mas de cinco o seis.

-Trabajar con animales seguro que comporta anécdotas de toda clase...

-Anécdotas tengo muchas, más con los jinetes o propietarios que con los propios caballos pero te puedo contar el caso de algunos caballos que cuando me escuchan llegar o me huelen se ponen a hacer ellos mismos los movimientos o ejercicios de estiramientos que les hago. También conozco a caballos que han aprendido a hacerse los cojos para no trabajar. Son increíbles.

-¿Cuántas veces te han dicho lo de "El hombre que susurraba a los caballos"?

-Muchas, pero sobre todo la mayoría desde el cariño y sabiendo lo positivo que es para los caballos este trabajo.

-¿Los caballos se dan cuenta de lo que les haces? ¿Te miran con cariño?

-Ellos sienten y entienden perfectamente que estás ahí para ayudarlos y la gran mayoría colabora relajándose y aceptando todo lo que se le pide. Te conocen perfectamente y además agradecen tu labor. Son animales excepcionales con una sensibilidad mucho más grande de lo que podemos llegar a imaginarnos. Es apasionante llegar a entender su lenguaje corporal y de gestos durante el tiempo que pasas con ellos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios