Como ya se venía anunciando e incluso proclamando desde la hermandad con sede en la Escuela de San José, el 2012 será el año de Nuestra Señora de la Estrella. Y así empezará a ser en virtud de los cincuenta años que se cumplen de la bendición de la imagen, una efemérides que comenzará a celebrarse ya mismo, porque es intención de la cofradía que en febrero se de el banderazo de salida a un denso programa que culminará cuando llegue el mes de junio con el gran momento de la salida procesional extraordinaria tras la función solemne ese mismo día, que pondrán el epílogo de las celebraciones. Lo que queda en el aire, aunque la intención es ya manifiesta por la hermandad con el importante aval de la orden lasaliana, será si finalmente se anuncia este mismo año, coincidiendo con esta conmemoración, la coronación canónica de la imagen. La petición formal ya hace tiempo que está en el palacio Bertemati a la espera de una contestación, y no se pierden las esperanzas de que a lo largo de este cincuentenario pudiera obtenerse alguna confirmación.

Lo que sí es seguro es que este medio siglo que se cumple de la existencia de una de las mejores obras de Sebastián Santos tendrá un signo de especial importancia en la hermandad: el nuevo manto bordado que ya está ultimado en el taller de Jesús Rosado en Écija. Esta pieza, que está resultando de gran belleza, culminará casi al ciento por ciento el paso de palio azul y oro de la dolorosa lasaliana.

Queda pendiente la decisión de si este estreno será el próximo Domingo de Ramos o se deja para la procesión extraordinaria del 2 de junio. En cualquier caso, el hermano mayor, Manuel Serrano, anticipó antes de las navidades que la hermandad quiere llevar a cabo un singular acto de presentación en el que se enseñe al Jerez cofrade y por supuesto a los propios hermanos la obra de Jesús Rosado, que sin duda es el principal estreno de la temporada.