Es el "regalito de Navidad" con que los cacos han obsequiado a la hermandad de Santa Marta, como dice el hermano mayor, Joaquín Marín. A la cofradía le han sustraído parte de la recaudación de la venta de participaciones de la Lotería de Navidad y dinero en efectivo, perteneciente a la bolsa de caridad de la hermandad, todo se eleva a alrededor de 5.000 euros. No obstante, el máximo responsable de la cofradía, pese al disgusto, reconoce al menos que no han desaparecido otros enseres ni se han producido daños en éstos o en la capilla, excepto el destrozo en dos puertas y en la reja de entrada al pequeño templo sede canónica de la hermandad. Al parecer, según consta en la denuncia interpuesta ayer por el hermano mayor, el robo de produjo entre la noche del sábado y la madrugada del domingo. Entraron en la casa de hermandad partiendo la cancela de acceso y la puerta de entrada a la sede social, que está junto a la capilla. Por el desorden que se vio, sí se delata que los ladrones registraron la sacristía y otras dependencias como la secretaria y la mayordomía. "Esto es un palo. Ahora que estábamos levantando cabeza nos llega esto", lamenta Marín que ahora busca soluciones para poder pagar los décimos de Navidad ya que las participaciones están vendidas.