Presentar algo que ya se conoce de antemano, como es el contenido del cartel de la Semana Santa, tiene un punto de absurdo, pero para el mundo cofrade local significa algo así como el banderazo de salida de la nueva temporada que se abre tras las fiestas navideñas que despeja el terreno para desembocar en la Semana Santa, con todos los previos que implica. Eso fue ayer lo que se vivió en la iglesia de La Victoria que acogió la puesta de largo del anuncio oficial semanasantero realizado sobre el cuadro que pintó el artista y cofrade de La Soledad, Antonio Lara. Fue un acto en el que, por encima de ver la obra pasada al papel y cómo ha resultado, tuvo otros ingredientes como la música cofrade a cargo de la Banda Municipal con un repertorio netamente jerezano e interpretado bajo la batuta de nuevo director de la formación Luis Román Cárdenas, todo el acto hilvanado en una acertada conducción del mismo a cargo de Enrique Víctor de Mora.

En el templo, ante la Virgen de la Soledad situada en su camarín, se dio cita el Jerez cofrade y autoridades como el consejo de la Unión de Hermandades, la alcaldesa junto a varios de sus delegados, el delegado de Hermandades, Joaquín Perea, y lógicamente los responsables de la cofradía protagonista de un cartel singular por el estilo del trabajo presentado por Antonio Lara, con las manos de la Dolorosa sujetando el clavo del Crucificado.

Cristo de la Expiración, como no podía ser de otra manera, abrió el acto. De Mora lo introdujo dando paso al descubrimiento de la obra, situada en un lateral de presbiterio, haciéndolo el autor, la alcaldesa y el presidente Pedro Pérez. Ciertamente, el pase a papel del cuadro de Lara es muy fidedigno al óleo original, teniendo en cuenta las dificultades que entraña reproducir una obra pictórica. Las intervenciones las abrió Álvaro de la Calle, hermano mayor de La Soledad, que exaltó la obra y la sensibilidad de Lara a la hora de plasmar el detalle de La Soledad, regalándole una reproducción del clavo que sostiene la Virgen entre sus manos. Pérez defendió la jerezanía del cartel aludiendo a los muchos que tienen a esa dolorosa en su devoción. Entroncó el motivo del cartel con el Año de la Fe, "un símbolo para todos los que lo pasan mal en estos momentos", y confesando su deseo de volver a ser costalero de la Virgen. Soledad de Madre, marcha de Sánchez Llamas, cerró el acto al filo de las nueve y media de la noche.