El Juzgado de lo Mercantil emitió ayer una resolución en la que aprueba el expediente de liquidación que, de manera inmediata, conduce a la fase de liquidación, es decir, la puesta en  venta de la bodega.

El proceso de difusión da un plazo de 15 días para la liquidación del negocio que, en este caso, ha sido puesto a la venta como unidad productiva con un precio de 20 millones de euros.  El procedimiento contempla una segunda fase dentro del proceso de difusión en caso de que no resulte la primera, por la que la empresa se volvería a poner a la venta con un precio mucho menor.

”Todo este proceso empezó en abril de 2011, con el inicio de los procesos concursales en todas las bodegas de Nueva Rumasa, siguió con el ERE de finales de abril de 2012 en todas ellas y, ahora se empieza a resolver en la primera, al salir a la venta”, recuerda el secretario general del Sindicato Provincial de Agroalimentaria de CCOO, Luis Páez.

Paéz espera una solución para los trabajadores que fueron afectados por el ERE de esta empresa, "la única de las bodegas de Nueva Rumasa que ha llegado al proceso de difusión al culminar la fase de liquidación que inició la administración concursal".

El sindicalista considera que la llegada de un nuevo comprador "supone una nueva esperanza para los 10 trabajadores que quedaron en la calle por el ERE así como una nueva oportunidad para reactivar el negocio".