A mediados de esta semana, el PSOE elaboró un comunicado donde criticaba que el Ayuntamiento firmara un convenio para ayudar en la financiación de la rehabilitación de la Iglesia de Santiago, un escrito que estaba firmado por el edil Abraham Granadino. Hubo respuesta municipal entonces pero ayer el PP como grupo quiso dar la suya elaborando otra nota donde le reprochó al edil que una empresa suya fuera la beneficiaria de una ayuda en materia de empleo que la Junta reclama desde hace más de un año.

La secretaria local de la formación, Lidia Menacho, recurrió a un asunto abordado en el mes de enero en el Parlamento y que, con posterioridad, se intentó volver a llevar a este órgano. La edil se refiere a la empresa Gralett, una sociedad de la que Granadino es socio único y que actualmente se encuentra en disolución tras un proceso concursal. Esta percibió en 2009 una ayuda de 30.000 euros por contratar a a diez ex empleados de Delphi. Sin embargo, la Junta reclamó la devolución de la cuantía puesto que entendió que no se había cumplido el objetivo de la concesión ya que los empleados no estuvieron contratados todo el tiempo establecido -el edil afirmó que los beneficiarios decidieron acabar con la relación contractual para acogerse a unos cursos de formación-. En 2013 hubo un juicio ya que la empresa se negó a devolver la ayuda, un fallo que fue a favor de la Junta.

Teniendo en cuenta esto, la edil del PP reclamó ayer al socialista que aclare si ha devuelto o no la subvención. En el comunicado apunta: "Es inaceptable, además de paradójico, que Granadino se haya dedicado precisamente esta semana, cuando han saltado nuevas noticias e imputaciones en torno a las subvenciones a cursos para los 'Delphi', a utilizar la demagogia más deleznable para criticar a la alcaldesa y su gestión". Por ello, Menacho le reclamó al edil socialista que "haga examen de conciencia y sea más coherente con lo que hace y con lo que dice, no sea que se le vaya a caer la cara de vergüenza".

Tras esto, el PSOE emitió su comunicado de réplica donde invitó al PP que acuda a los tribunales "si tiene alguna prueba o duda de la trayectoria profesional como empresario" sobre Abraham Granadino. En este sentido, defendió su labor al frente de la sociedad asegurando que "de las cerca de 80 [ayudas] que solicitó, solo le fueron concedidas dos, totalmente legales". En cuanto a la cuestionada subvención de 30.000 euros negó que la Junta reclame su devolución -el consejero de Economía, José Sánchez Maldonado, dijo en enero que se había abierto un expediente de reintegro- sino que "se justifiquen, como cualquier otro tipo de subvención".

El edil aseguró que estas críticas realizadas por Lidia Menacho han sido "ordenadas" por la alcaldesa, María José García-Pelayo, por "dos razones fundamentales". En primer lugar hizo mención de que "no le ha gustado" a la regidora "la discrepancia del PSOE sobre los 650.000 euros que ha destinado a varias iglesias cuando hay cientos de familias en Jerez pasando hambre". Y, en segundo lugar, afirmó que la alcaldesa "está muy cerca de ser imputada por el caso Gürtel" por lo que "intenta hacer pensar que todos los políticos son iguales". "Es lamentable que la alcaldesa no dé la cara y se esconda tras la correveidile de turno. Qué triste es tener una alcaldesa como Pelayo que no admite la crítica, que actúa con el ordeno y mando continuo, que solo entiende o estás conmigo o estás contra mí", agregó.