Como dice el refranero español, 'nunca llueve a gusto de todos' y en Jerez, el paso de La Vuelta ya ha servido para generar toda una corriente de opinión entorno a sus preparativos. Sin quitar trascendencia a lo que supone que la ciudad sea el punto de partida de esta gran competición, con relevancia a nivel internacional, un hecho que nadie cuestiona y que aplaude el sector servicios y el propio ciudadano de a pie, no ocurre lo mismo con los adecentamientos previos, centrados únicamente en las zonas por las que pasarán los ciclistas.

"Me parece muy bien que se quiera dar buena imagen al exterior de la ciudad, eso nos beneficia a todos, pero que no se olviden del resto de Jerez", apunta Miguel Zarzuela, uno de los máximos referentes del movimiento vecinal en la localidad.

En esa misma línea se expresa Francisca Pazos, presidenta de la Asociación de vecinos Pedro Palma de San Benito. Al contrario que muchos, que aprovechan estos días para sacar quejarse, Pazos defiende "una lucha diaria pero todos los días del año". No obstante, entiende que "La Vuelta viene a Jerez y Jerez no es sólo el recorrido planteado, los señores que vengan callejearán por la ciudad y hay algunos sitios que están en un estado vergonzoso".

Evidentemente, conforme nos alejamos del centro el grado de disconformidad es mayor. En la Zona Sur, por ejemplo, sólo es cuestión de pasear y preguntar para encontrar respuestas similares. Muchos vecinos lamentan "el estado de abandono al que nos tienen sometidos aquí", y con cierta ironía piden a la alcaldesa "que cuando venga otra vez La Vuelta pase por la Zona Sur, porque entonces arreglarán las aceras, podarán los árboles y pintarán las señalizaciones", apunta Javier, vecino.

Este mismo parecer se mantiene en otros puntos de la ciudad como la zona de La Canaleja. Allí, La Vuelta pasa a pocos metros, pero aún así los vecinos andan hartos de la "falta de limpieza de las calles, parques y jardines de esta zona". "Aquí pagamos los impuestos municipales estipulados, al igual que otros vecinos en otras zonas de Jerez", asegura enojada Ruth Ríos, una de sus vecinas.

Otros a los que la ronda ciclista afecta de lleno, en Palos Blancos, por ejemplo, también lamentan que se sigan sin arreglar calles "con socavones peligrosos", señala Jesús Palomo. En este caso, no hay mal que por bien no venga y los propios vecinos ya han dejado claro al Ayuntamiento que en cuanto acabe la etapa aprovecharán las vallas que bordearán el recorrido para señalizar esos socavones. Del mal, el menos, que diría aquel.

Uno de los asuntos que más molesta a muchos jerezanos ha sido el de las obras de la calle Larga, en su opinión innecesarias, ya que en determinados puntos de la ciudad "existen una intervención más inmediata que esa", explica Miguel Zarzuela.

"Y no me refiero a obras costosas, sino a pequeños retoques del acerado, colocación de bombillas y arreglo de socavones", apunta.

La indignación a este respecto ha invadido también, como todo en estos tiempos, las redes sociales. En ellas encontramos quejas constantes ante el comportamiento del Ayuntamiento, que ha lavado la cara de una manera extraordinaria a determinados puntos de la ciudad que estaban un tanto olvidados.

Entre las recriminaciones más llamativas está el tema del pintado de las señalizaciones y también la limpieza en profundidad que ha sufrido el Parque González Hontoria, que según muchos, desde antes de la pasada Feria del Caballo no recibía un remozado tan significativo.