Como si de cualquier amigo se tratara, entre los pasillos y el refectorio de los Claustros de Santo Domingo se escuchaba ayer tarde hablar de que 'el Almunia' cumplía 25 años. Un cuarto de siglo de vida que el instituto situado en La Granja celebró con la mejor compañía posible entre decenas de personas de la comunidad educativa que han ido pasando por las aulas del centro desde 1989. Tampoco faltaron empresarios de las distintas entidades que ofertan prácticas en los distintos grados de Formación Profesional así como la representación de la administración pública. En este último sentido, las primeras filas estuvieron ocupadas por la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo y la delegada territorial de Educación, Cristina Saucedo, así como los delegados municipales de Educación y Juventud, Lidia Menacho; de Urbanismo, Agustín Muñoz, y de Personal y Seguridad, Javier Durá.

La dirección del centro tuvo un detalle con cada docente pasado y presente que acudió a la cita de ayer. Conforme iban entrando en el frío refectorio de los Claustros, dos alumnos iban entregando un CD conmemorativo donde se recogen imágenes y testimonios de los 25 años de vida del centro jerezano. En los pasillos, por otro lado, se veían amontonadas cajas de dulces y catavinos cortesía de González Byass, que ofreció una copa de caldo jerezano a la finalización del acto.

El maestro de ceremonias, en el sentido más literal de la expresión, fue uno de los docentes del centro que "por deformación profesional" pasó lista entre los presentes, llegando a recordar incluso al Pequeño Nicolás. La primera parada de esta ceremonia en el frío y espectacular refectorio estuvo protagonizada por un grupo de alumnos de Segundo, Tercero y Cuarto de la ESO, que dirigidos por el profesor de música del centro, Francisco Molla, interpretaron el himno estudiantil 'Gaudeamus igitur'.

El actual director del instituto Almunia, José María Pérez, recogió el relevo para hacer un exhausto repaso de los hitos conseguidos por el centro de La Granja en este cuarto siglo de vida, que no son pocos. Pérez dijo sentirse "muy orgulloso. Hoy es el día de decirlo públicamente. Hemos formado personas, durante 25 años hemos hecho sociedad". El director aseguró que "gracias a la labor de todos" han conseguido "los objetivos marcados desde 1989, educar a personas de una forma objetiva, coherente, abierta, enseñando derechos pero también obligaciones. Creo que hemos conseguido ese reto". En esta implicación, Pérez resaltó tanto al equipo docente "como al que no lo es, con una especial mención a la Ampa, cuya aportación en el consejo escolar ha sido impagable".

El centro jerezano fue el primero en la ciudad en integrar las enseñanzas medias o en tener entre sus aulas a la primera alumna con discapacidad de Jerez, entre otros éxitos nombrados por José María Pérez. Tocaron 'techo' a mitad de la década de los noventa con 900 alumnos en el centro y han experimentado los cambios de las diferentes leyes orgánicas de los Ministerios de Educación.

En números, 4.382 acreditaciones avalan estos 25 años de vida. Concretamente, 2.135 títulos corresponden a la ESO, 1.712 a Bachillerato, 348 a formaciones profesionales de grado medio y 187 a los de grado superior. Además, resaltaron que el número de docentes que ha pasado por las aulas en este cuarto de siglo han sido 476 con hasta cinco directores, contando el presente que es la segunda vez que ocupa este cargo.

El escenario del refectorio se convirtió tras la intervención del director en un acercamiento a la vida más real del centro. Representantes de alumnos y profesores tomaron la palabra para hacer un repaso por las distintas anécdotas que guardan de su paso por el centro que pusieron el broche de oro a este reconocimiento para 'el Almunia'.