Cientos de personas recorrieron ayer las calles del centro para reclamar el fin de la violencia de género, durante la protesta convocada por el Consejo Local de la Mujer. Tras la colocación del lazo morado en el balcón del Ayuntamiento, la manifestación partió de la calle Consistorio, con la presencia de representantes de todos los partidos políticos, entre los que se encontraba el candidato de Unidad Popular Izquierda Unida a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, que ayer participaba en varios actos en Jerez. Situado en la cabeza de la manifestación, Garzón abogó por una concienciación de la ciudadanía para luchar de forma activa contra la violencia machista, y defendió "una ley integral" contra este tipo de violencia "que incluya un presupuesto razonable que permita tener muchos más recursos a favor de la prevención para evitar los asesinatos machistas". Pidió además "un cambio de concepción, que significa que la violencia machista tiene que incluir no sólo la física sino también otro tipo de violencia ejercida contra la mujer por parte del hombre, como la violencia sexual o la violencia económica". El candidato de Unidad Popular dijo que es necesario un ejercicio de pedagogía continuo. "El feminismo entendido como forma de vida y como un elemento y un pilar transversal en nuestra sociedad para todos los días y para que los hombres seamos conscientes de todos los mecanismos de opresión sobre la mujer que existen en nuestra sociedad patriarcal".

En nombre de las organizadoras, la vicepresidenta del Consejo Local de la Mujer, Patrocinio Bermúdez, confió en que "sea la última manifestación que haya que convocar, porque todo este problema haya pasado a la historia, pero claro es muy difícil porque todos los días hay nuevos asesinatos y esto la sociedad no lo puede resistir más". Bermúdez valoró que en la movilización se observase la presencia de bastantes hombres. "Eso es un logro, porque a los hombres hay que educarlos desde pequeños y recuperar los valores". A su lado, la teniente de alcaldesa de Igualdad, Acción Social y Medio Rural, Carmen Collado, lamentó la muerte de mujeres, "asesinatos brutales a manos de sus parejas o ex parejas maltratadoras". Calificó la jornada de "triste", "un día de luto", y abogó por conseguir una sociedad igualitaria "en la que no haya ningún poder que impere en la relación de amor". Collado realizó un llamamiento a todas las instituciones y los poderes públicos porque "esto es un problema de Estado y así debe ser tratado, al igual que se ha tratado el terrorismo. Esto es un terrorismo brutal contra las mujeres". Y también hizo una llamada a la población joven, "porque son el futuro de nuestra sociedad y, a través de la educación que les hacemos llegar, deben cambiar la sociedad haciéndola más igualitaria".

La ex alcaldesa y número dos del PP al Congreso por la provincia, María José García-Pelayo, reivindicó que "las mujeres puedan vivir seguras y tranquilas y que no corran peligro sus vidas a manos de su pareja, pero es verdad que hasta que esta lacra no se termine tenemos que estar aquí". Pelayo tuvo un recuerdo especial para las dos mujeres jerezanas, Miriam Tamayo y Raquel Barrera, que murieron a manos de su ex novio y su marido, respectivamente. "Yo siempre las llevaré en el recuerdo porque fueron días muy duros los que vivimos con sus familias y es importante que todas las Administraciones nos demos la mano y trabajemos juntas en esta lacra social". La dirigente popular afirmó que "se habla muchísimo de un pacto por el empleo, que estoy segura que es necesario, se habla muchísimo de un pacto por la educación, también necesario, pero no podemos olvidar nunca que para que las mujeres puedan trabajar y estudiar, en primer lugar tienen que vivir y es fundamental apartar este tema del debate político y sentarnos todos a la mesa para llegar a un acuerdo que permita adoptar medidas". Aunque defendió que éstas ya existen "porque se ha hecho una reforma del Código Penal importante en esta legislatura, se ha reconocido que los menores también son víctimas de la violencia de género, se han endurecido las penas para los hombres que matan a las mujeres", apostó por dar un paso más importante "y asegurarnos de que cualquier mujer que sufre violencia de género no tenga miedo a denunciar porque luego no cuente con los apoyos necesarios y ahí hablamos de la implicación de todas las Administraciones".

La manifestación vino precedida de distintos actos que se celebraron a lo largo de la mañana en la ciudad como la apertura de los llamados 'Círculos de Mujeres contra la Violencia' o una jornada organizada por Diputación en el Campus universitario. A la finalización del recorrido por el centro, en la Alameda del Banco, se leyó un manifiesto contra la violencia de género, en el que se destacó que "el silencio nos hace cómplices".