La ciudad cuenta con 16.000 farolas, pero no todas cumplen la Ley de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental de Andalucía. ¿En qué se traduce? Pues que el Ayuntamiento tiene la obligación de sustituir todas las luminarias que emiten hacia el cielo más de un 25% del flujo hemisférico (ver infografía), ya que la emisión de luz deberá ser mayoritariamente sobre el suelo. En la actualidad existe un gran número de luminarias que emiten luz hacia arriba, como son las farolas globo y algunas fernandinas.

Respecto a la renovación del alumbrado, del que aún no hay coste total, el Ayuntamiento reconoce que "la instalación de las nuevas farolas tipo leds conllevará beneficios de ahorro en el consumo energético y en el mantenimiento, además de un descenso notable de la contaminación lumínica y medioambiental". "Estamos sustituyendo lámparas de mercurio, cuya instalación en la actualidad está prohibida porque son altamente contaminantes, por lámparas de menor consumo de potencia y un coste de mantenimiento inferior", informa el teniente de alcaldesa de Sostenibilidad, Participación y Movilidad, José Antonio Díaz, quien añade que esta renovación "nos va a permitir ahorrar miles de euros y cumplir la normativa europea". Desde el gobierno local reconocen que la ciudad presenta zonas "que se encuentran bastante deterioradas, principalmente los puntos de luz de globos, que presentan grietas y roturas, están muy opacos y han perdido la impermeabilidad, por lo que los elementos eléctricos están expuestos a la lluvia, aumentando el riesgo de avería".

Aunque para estos cambios aún hay tiempo - el plazo se inició en 2010 y termina en agosto de 2020- en lo que ya Jerez va con retraso es en la elaboración del mapa de zonificación lumínica, un documento que tenía como fecha límite el pasado 15 de febrero. "Nos hemos encontrado con que estamos fuera del plazo por la falta de voluntad política del gobierno municipal anterior", lamenta Díaz. El Ayuntamiento ha iniciado los trabajos de elaboración de su propuesta de este mapa para la protección de la calidad del cielo nocturno, frente a la contaminación lumínica y el establecimiento de medidas de ahorro y eficiencia energética.

Dicha zonificación consiste en hacer una división del territorio en distintas áreas (E1, E2, E3 y E4) para establecer niveles de iluminación adecuados a los usos y sus necesidades, y limitando los requisitos técnicos en las instalaciones de alumbrado exterior, tanto públicas como privadas.

La zona E1 alberga las áreas oscuras de suelos no urbanizables y está formada por espacios naturales, para salvaguardar la fauna, y observatorios. En el término de Jerez hay cinco áreas oscuras: Montes de Propio, la Laguna de Medina, Los Tollos, Laguna Cantera, El Tejón y La Suara. Estas zonas son competencia exclusiva de la Junta de Andalucía, pero las pedanías pueden proponer su ampliación.

La zona E2 corresponde a los suelos rústicos donde el flujo luminoso debe ser reducido; a partir de este nivel la zonificación ya es competencia de las ELA. La zona E3 integra a los suelos urbanos y periféricos con flujo luminoso medio. La zona E4 identifica espacios de luminosidad exterior elevada, y recoge áreas de actividades comerciales o de alta densidad de población (100 viviendas por hectárea).

Con este "instrumento de control", el Ayuntamiento tiene por finalidad el establecimiento y desarrollo de las medidas de protección de la calidad del cielo nocturno, para minimizar y corregir los efectos de la dispersión de luz artificial; preservar las condiciones naturales de oscuridad en beneficio de los ecosistemas nocturnos en general; promover el uso eficiente del alumbrado, sin perjuicio de la seguridad de los usuarios; y reducir la intrusión lumínica en zonas distintas a las que se pretende iluminar, principalmente, en entornos naturales e interior de edificios residenciales.

El teniente de alcaldesa de Sostenibilidad, Participación y Movilidad remarca que se ha dado un impulso a la elaboración zonificación lumínica del término de Jerez "que ante todo persigue salvaguardar la calidad del cielo nocturno". "En primer lugar vamos a constituir una mesa técnica conjunta donde estarán técnicos del Ayuntamiento, representantes de todos los ayuntamientos pedáneos y de la Diputación donde podamos trabajar el mapa y hacer una división del territorio en distintas áreas para establecer niveles de iluminación adecuados". Precisamente, subraya que los gobiernos pedáneos "deberán hacer su propia zonificación porque está dentro de su competencias. La colaboración es imprescindible, lo más sorprendente es que alguno de los alcaldes pedáneos reconocieron en la primera reunión que desconocían la obligación de elaborar este mapa".