El sindicato CGT anunció ayer a través de los dirigentes Nieves Carrillo y Juan José Piña que el pasado viernes interpuso una demanda a la alcaldesa, Mamen Sánchez, y a la delegada de Recursos Humanos, Laura Álvarez "por prevaricación y malversación de fondos".

En palabras de Carrillo, esta acción se lleva a cabo "porque han empleado cerca de 60.000 euros para pagar a jefes de departamento y directores días de libranza, cuando específicamente nuestro convenio colectivo establece que no se podrá pagar libranzas ni a directores ni a jefes de departamento porque ya tienen en su complemento específico la disponibilidad. Sin embargo, lo han pagado durante todo este año y creo que incluso en esta nómina corriente, algo contrario a la legalidad".

La sindicalista incidió en que "si vamos a ser intervenidos por Hacienda tanto los técnicos como la intervención deberían ser muy cuidadosos. Tienen que mirar con lupa lo que se paga y no se paga, porque hay veces que se han incluido conceptos y la nómina ha estado retenida porque intervención no estaba de acuerdo (...) Me parece que han jugado con el dinero público para pagar a su cuadro de mando", reiteró.

El gobierno local, por su parte, dejó claro que "aún no tiene conocimiento formal de la demanda, por lo que no puede pronunciarse sobre ella, hasta tanto sea conocida y estudiada por los servicios jurídicos". No obstante, desde la calle Consistorio explicaron que el asunto comunicado a los medios relativo al objeto de la demanda, "es un criterio establecido por el anterior gobierno municipal del PP que se ha venido aplicando y que este gobierno municipal en el mes de marzo paralizó, encargando su estudio, al existir diferentes interpretaciones de los distintos sindicatos".

Juan José Piña fue el encargado de reprochar la actitud de los demás sindicatos que reprobaron la actitud de CGT en las manifestaciones por la aprobación del plan de ajuste. En este sentido, dijo que "nuestra forma de hacer sindicalismo es la misma que desde la Transición". El sindicalista llamó al papel Ganemos e IU en la negociación de "cobardes, y no estoy ofendiendo, estoy utilizando el término que me parece. Cobarde es el que no se atreve a afrontar los problemas con valentía, como están haciendo. No son capaces de decir que hace falta gente y de pedir al gobierno central o a la administración competente que los ayuntamientos tienen que ser financiados de otra manera, están poniendo parches y no se atreven". Piña pidió así a Ganemos "que nos explique por qué han votado que sí y esa postura cobarde de IU absteniéndose. No tenían información ni documento que acreditara que esa iba a ser la salvación, sino que simplemente han pedido un préstamo y el Ministerio les exige un plan de ajuste".