Varias bodegas del Marco han comenzado a dar dinero a cuenta a los viticultores por la vendimia 2008, a la espera de que haya un acuerdo sobre el precio de la uva. Según ha podido saber este medio, las cantidades a cuenta que están aportando las bodegas están en torno a las 40 pesetas/kilo de uva (en las relaciones contractuales entre las bodegas y los viticultores la peseta sigue primando sobre el euro. Cuarenta pesetas equivalen a 24 céntimos).

Estos primeros movimientos se producen dos meses después de que concluyera el grueso de la vendimia, sin que se haya producido ningún tipo de avance en las negociaciones para establecer un nuevo acuerdo en el precio de la uva. En realidad, ni tan siquiera se puede hablar propiamente de que actualmente haya negociación, con las bodegas incluso renuentes a establecer un precio de referencia con las organizaciones representativas de los viticultores tras las últimas investigaciones abiertas en el Marco de Jerez por la Comisión de Defensa de la Competencia, si bien es cierto que por otros asuntos.

Lo normal hasta ahora es que la vendimia se facture antes de que acabe el año, pero hay que tener en cuenta que los viticultores necesitan liquidez ya, no solo por cobrar la cosecha, sino porque ahora, en breve plazo, hay que realizar diversos trabajos en la viña, como por ejemplo la poda.

Fuentes del sector señalaron que esas cuarenta pesetas hay que tomarlas como lo que son, un dinero a cuenta, pero que "puede ser orientativo" de por donde puede andar el precio final, ya que se trata de dos tercios del precio que se fijó en el último acuerdo intersectorial. Hay que recordar que en 2006 y 2007 el precio 'oficial' de la uva (en la categoría jerez superior) fue de 61 y 61,5 pesetas, es decir, 36 céntimos de euro en ambos casos. Estos son los precios que, como mínimo, están exigiendo los viticultores. Por el momento, los más activos (al margen de las organizaciones sectoriales) es un grupo de viticultores sanluqueños, que incluso han comenzado una campaña de concienciación entre los grupos políticos de la localidad.

Unas líneas atrás se ha señalado que esas 40 pesetas que están pagando a cuenta algunas bodegas es una cantidad 'orientativa' de por donde puede andar el precio que se fije para 2008, ya que se trata de dos tercios del precio de 2006 y 2007 y, probablemente, el acuerdo esté en algún punto intermedio entre las 40 y las 61 pesetas, ya que en la actual situación de excedentes que hay en el sector y unas ventas a la baja año tras año, parece muy complicado que las bodegas paguen más que en las dos campañas anteriores.

El máximo precio de la uva fue entre los años 1997 y 2000, que se pagó a 81 pesetas/kilo. Entre 40 y 46 pesetas se pagaron de 1990 a 1993.