Jerez

Los vecinos de Chapín preparan patrullas contra la movida en la zona

  • Es una de las medidas que quieren poner en marcha tras los continuos problemas en la avenida de Lola Flores · Los afectados afirman que la situación "está empeorando" y critican la pasividad municipal

Los vecinos de Chapín han comenzado ya a movilizarse para buscar un solución al problema de la movida juvenil en los alrededores de la avenida Lola Flores, donde se ubica un gran número de pubs. Los graves incidentes de finales de septiembre, cuando los jóvenes provocaron pequeños fuegos, lanzaron ladrillos y destrozaron locales, ha sido el detonante de una situación que los residentes llevan muchos años aguantando. Los afectados creen que el Ayuntamiento debería actuar con mayor contundencia porque, aunque "es cierto que la Policía controla ahora un poco más la zona", lo hecho hasta el momento "no ha solucionado nada, al contrario, la situación está empeorando", explica un vecino. De hecho, este fin de semana han vuelto a sufrir episodios vandalismo (rotura de lunas de vehículos) "porque vienen a beber y pierden el control". Los residentes en la zona, que no pueden dormir debido al ruido, aseguran que tras la rotura de las tapias de los locales vacíos "ya hay indigentes durmiendo dentro, como pasaba antes".

Así las cosas, tienen previsto mantener reuniones en breve con distintos responsables políticos con el fin de recabar más apoyos. "Queremos contactar con las distintas urbanizaciones de la zona para ir todos juntos", explica uno de los afectados, asegurando que "queríamos hacer una manifestación, pero hemos preferido contactar con más vecinos antes de hacer algo así".

No obstante, lo que sí se plantean es realizar patrullas vecinales, como recientemente hicieron los vecinos de Guadalcacín para luchar contra el botellón. "Estamos hablando para ponernos de acuerdo y que cada noche sea un grupo distinto", explican, señalando que "esta parece ser la única solución ahora, porque los vecinos están hartos de las promesas de la alcaldesa y de Irene Canca (delegada de la Zona Norte)". Más aun cuando, según relatan, todos los fines de semana tienen que soportar "que le hagan cosas a nuestros coches, que tiren botellas por cualquier lado, que pasen circulando a toda velocidad y con la música alta. Yo tuve que vender mi coche y encima nuestras familias temen que salgamos a la calle porque pueden tomar represalias contra nosotros". De momento, los vecinos estudiarán las medidas a tomar a lo largo de esta semana, aunque señalan que harán algo ya dado que "este problema lo único que hace es empeorar".

Hay que recordar que el Ayuntamiento ya se refirió la pasada semana a este asunto tras las quejas de los vecinos que aseguraban que no se estaba actuando. En concreto, la delegada Irene Canca señaló que las denuncias públicas de los vecinos de Chapín por los altercados del pasado 22 de septiembre "se han tomado en el distrito y se han tramitado a sus respectivas delegaciones". Asimismo, ante la petición de la asociación vecinal de vallar o tapiar las entradas a los locales que se encuentran a la espalda de Lola Flores, Canca recalcó que "antes de hacer cualquier cosa hay que informar al propietario de ese sitio, tenemos que tener claro que hablamos de propiedades privadas", y resaltó que "esto no quiere decir que no estemos al corriente de lo sucedido, porque sí lo estamos".

Pese a estas reacciones, lo cierto es que los vecinos continúan esperando una acción definitiva que acabe con este problema, porque "la Policía viene y se va. No es suficiente que pasen, tiene que haber un mayor control y se deben tapiar de nuevo los locales que están abandonados", explica un afectado.

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