El Sindicato Independiente de la Policía Local (SIP), mayoritario en la Policía Local, rompió ayer las negociaciones para terminar con el prolongado conflicto -a pesar de haber alcanzado otro principio de acuerdo la semana pasada con la delegada municipal de Recursos, Ainhoa Gil- y achacó al resto de las secciones sindicales -UGT, CCOO y CGT- ser los responsables del fracaso después de una maratoniana reunión celebrada ayer de la comisión de seguimiento del convenio municipal. Así las cosas, el SIP mantiene la actual 'huelga a la japonesa', por la cual se están poniendo más multas que de costumbre, y volvió a recomendar a la ciudadanía que "aparque bien y beba poco" en referencia a la próxima Feria, en la que los agentes podrían ponerse a las pilas a la hora de extremar el celo en los controles de alcoholemia. No obstante, la delegación municipal de Seguridad ya lanzó un mensaje de calma a la ciudadanía indicando que los dispositivos policiales, como esos controles, no los deciden los agentes de a pie, si no la jefatura de este cuerpo policial, cuando la ejecutiva del sindicato mayoritario amenazó con recrudecer el conflicto.

El secretario general del SIP, Alfonso Lozano, mantuvo que las otras tres organizaciones sindicales no han respaldado su propuesta para modificar el cuadro horario, que es la normativa interna que regula los horarios de trabajo, libranzas y períodos de vacaciones de los 336 funcionarios de la Policía Local.

En este sentido, Lozano acusó al resto de organizaciones sindicales de "querer reventarlo todo" y no "querer solucionar el conflicto" por lo que anunció "sorpresas" durante la celebración de las próximas motorada y Feria.

Por su parte, Alfonso Cárdenas, de UGT, indicó a este medio que "el resto de secciones hemos rechazado el principio de acuerdo porque la pretensión del SIP y de la misma Delegación de Seguridad era incluir también los servicios extraordinarios. Nosotros estábamos prácticamente de acuerdo en el tema del cuadro horario, pero el otro aspecto, que es muy importante también para la plantilla, debemos negociarlo entre todas las partes, porque tienen su representación, y no como parecía ayer, que era una imposición por parte del SIP, de la delegación y de la jefatura de la Policía. En el juego democrático es aceptable la postura de unos y de otros y por eso tenemos que negociar de nuevo".