Ha sido un gran mazazo para buena parte de la familia rociera jerezana y en gran medida para el mundo de las hermandades locales. El carismático padre Alexis deja la orden de los dominicos y todas sus responsabilidades y asistencias espirituales en las hermandades, incluida la del Rocío de Jerez, por haber solicitado un año de dispensa en la orden religiosa. La causa que le ha llevado a tomar esta decisión la mantiene en reserva pero todo apunta a una situación delicada cuya consecuencia ha sido la petición que se le formuló de abandonar la ciudad y ponerse a la disposición de sus superiores, lo que conllevaba dejar Jerez y aguardar lo que dispusiera la orden. Dado que los motivos no están del todo claros y al estar en desacuerdo. La huella que deja el padre Alexis entre los rocieros es muy profunda, tanto que son muchas las voces que se preguntan el por qué de la situación actual. A lo largo de sus años en la hermandad rociera, su impronta ha marcado una época al frente de la dirección espiritual de la hermandad.