Pasó el tiempo de las propuestas, también el de los votos y los análisis. Se acabó el tiempo de las quinielas y de las hipótesis. Hay un sillón que busca dueño en San Juan de Dios y se necesita un pacto, acuerdo de mínimos o lo que sea necesario para poder gobernar la ciudad. En el tablero hay dos jugadores principales, Teófila Martínez (PP), que ha obtenido el mayor número de votos y 10 concejales, y José María González (Por Cádiz sí se puede), con 8. Los dos contendientes empezaron ayer a mover ficha y dejaron claro una vez más que quieren gobernar la ciudad. Entre ellos un árbitro, el PSOE y los cinco concejales de Fran González, que tiene el poder de la decisión de que uno u otro alcance la Alcaldía.

Los contactos los hará el Partido Popular de manera tradicional, llamando a los partidos para tratar de llegar a puntos comunes. Por Cádiz sí se puede lo quiere hacer mediante un debate público abierto a la ciudadanía y a los medios de comunicación con las otras dos fuerzas con las que quiere llegar a un acuerdo, PSOE y Ganar Cádiz en común.

El Partido Popular envió ayer un comunicado en el que anuncia que a partir de hoy va a iniciar una ronda de conversaciones con todos los partidos que han obtenido representación municipal "asumiendo la responsabilidad que las urnas le otorgaron en unas elecciones que ganó en la ciudad por más de 4.000 votos al segundo partido político".

Teófila Martínez no da por lo tanto descartada la posibilidad de alcanzar la Alcaldía a pesar de que para ello tiene que llegar a un acuerdo antinatura con los socialistas. Según asegura la todavía alcaldesa, va a proponer a todos ellos un acuerdo de estabilidad basado en seis líneas de gobierno que van desde el blindaje de las políticas sociales hasta la elaboración de un plan de empleo, "pasando por varias áreas que el PP considera vitales para asegurar la estabilidad y el futuro de Cádiz".

Teófila Martínez abundó en su discurso tras las elecciones en la que perdieron siete concejales y la mayoría absoluta: "Hemos sido la lista más votada, tenemos la responsabilidad de formar gobierno y lo vamos a hacer como siempre lo hemos hecho, anteponiendo la ciudad de Cádiz por encima de todo, por encima de estrategias y de los intereses de otras formaciones que no han expresado ni una sola línea de futuro para Cádiz".

El problema es que al Partido Popular no le salen las cuentas porque la alianza con Ciudadanos le dejaría a dos ediles de tener la mayoría absoluta. El clavo ardiendo al que se puede aferrar es a un pacto o acuerdo con el PSOE, algo que para esta formación sería como darse un tiro en el pie.

Al otro lado, otra posibilidad de pacto a tres bandas pero también con sus dificultades por tener que unir a Por Cádiz sí se puede con uno de sus enemigos naturales por incluirlos en la casta, el PSOE, y a la vez el recelo que tienen estos sobre el partido emergente.

En cualquier caso, José María González quiere ser el alcalde de la ciudad y para ello va a presentar su candidatura para convertirse en el primer edil de la ciudad y sacar a Teófila Martínez de la Alcaldía, lugar en el que lleva instalada desde 1995 tras conseguir la mayoría absoluta en cinco ocasiones. Para ello dijo que esperaba contar con el apoyo político de las fuerzas que reclaman un cambio, por lo que los emplazó al citado anteriormente como debate público de investidura.

Al igual que Martínez necesitaría el apoyo del PSOE y el casi seguro de Ganar Cádiz en Común. En este sentido, ya mandó un recado a los socialistas al decir que "les va a tocar retratarse. ¿Quieren o no cambio?", se preguntó el líder de Por Cádiz sí se puede sobre una formación que todavía no ha hecho pública su postura.

En este proceso que calificó "de mano tendida y diálogo" excluye a dos fuerzas que han obtenido representación, el Partido Popular y Ciudadanos.

La fórmula elegida huye de "las reuniones de despacho donde se mercadea con sillones", por lo que quiere llevar a las formaciones que pueden apoyar su investidura a un debate "público y abierto" el próximo 5 de junio al que puedan asistir los ciudadanos y los medios de comunicación y en el que "se discuta de políticas y propuestas para solucionar la emergencia social que viven los gaditanos". De momento todavía no tienen decidido el formato ni el lugar del debate.

José María pone una serie de condiciones a la hora de llegar a un punto de encuentro con las otras formaciones políticas que podrían crear un tripartito: la realización de una auditoría pública de las cuentas municipales y la administración local, donde se pondría la lupa en asuntos como "el sobrecoste de las obras", los gastos de protocolo y la deuda municipal.

En ese paquete de decisiones también se incluyen "medidas valientes para paralizar los desahucios de primera vivienda" y que Procasa sea "un garante del derecho constitucional a la vivienda". De ahí que mostró ayer su compromiso "firme" de erradicar la infravivienda en un mandato, garantizar los servicios básicos de luz y agua a los gaditanos y remunicipalizar diversos servicios públicos.

Todo ello con el objetivo de "colocar a la gente en el centro de las decisiones políticas" después de estar "pasándolo mal.

El líder de Por Cádiz sí se puede señaló ayer en la rueda de prensa que ofreció en la sede de la Asociación de la Prensa de Cádiz que no entendía de líneas rojas con respecto a las exigencias que pueden llevar las otras formaciones políticas para tratar de llegar a acuerdos, aunque señaló que escucharán e incorporarán "buenas propuestas". Eso sí, advirtió que esta ronda de debate con los otros partidos "traerán sus propuestas pero también sus mochilas", ya que entiende que "somos nuevos pero no somos tontos".

A José María González, conocido popularmente como Kichi, no le preocupa que no se consiga llegar a un pacto de gobierno y todo se quede en un mero apoyo a la investidura, como ahora parece indicar, lo que podría causar la ingobernabilidad del Ayuntamiento.

Por otro lado, al igual que señaló ayer la líder de Podemos en Andalucía, la gaditana Teresa Rodríguez, González descarta que el posible apoyo del PSOE en Cádiz a su formación pueda influir en la postura de este partido emergente respecto a la investidura de Susana Díaz como presidenta de la Junta: "No tiene nada que ver y además Cádiz no va a ser moneda de cambio bajo ningún concepto. Ni para la Junta de Andalucía, ni para Susana Díaz, ni para Podemos siquiera". Pues hechos los planteamientos, ahora sólo queda llegar a acuerdos.

El Partido Socialista por su parte tiene muy claro que va a estar en todos los sitios donde se les llame para tratar de llegar a acuerdos por el bien de la ciudad.