El Jerez Industrial cayó en Villamartín y se dejó prácticamente todas sus opciones de pelear por el ascenso a Tercera División. El equipo industrialista sufrió un arbitraje calamitoso y además no fue el de otras ocasiones.

El partido, para colmo, acabó con una lamentable tángana en la que el jugador del Jerez Industrial Álex Valero agredió a un futbolista local. Varios jugadores del Villamartín se fueron para el extremo derecho y Chema Domínguez, preparador de porteros del Industrial, tuvo que parapetar al jugador. El árbitro, que tuvo una nefasta actuación y no vio nada en esa acción como tampoco en la falta a Alejandro que precedió al 1-0 o un claro penalti que cometieron sobre Juanma Carrasco y perdonó la roja directa a Nene por una patada a Benítez, optó por pitar el final del partido viendo que las cosas podían ir a peor. Los ánimos se apaciguaron y la directiva local pidió la presencia de las fuerzas del orden, en parte porque varios aficionados locales -que no representarán ni al club ni al pueblo pero insultaron a los aficionados industrialistas en varias fases del partido y a la conclusión- merodeaban por las inmediaciones y también porque tenía intención de presentar denuncia contra Valero, apoyándose en las imágenes que habían grabado durante el partido.

En lo futbolístico, Mena apostó de salida por Riki en punta y Valero en banda derecha, quedándose Corral en el banquillo. Los locales, por su parte, conocían el resultado del Mazagón, que había perdido por la mañana 4-2 en Arcos contra el Xerez Deportivo. El triunfo les dejaba a cinco puntos del descenso con nueve por jugar y no estaban dispuestos a dejar pasar loa oportunidad.

El Jerez Industrial entró en el partido muy frío, cohibido, como si la presión pudiera a los jugadores. Durante los primeros 25 minutos sólo hubo un equipo sobre el terreno de juego y ese fue el Villamartín.

Así que el Villamartín salió a por el Jerez Industrial con una presión asfixiante que provocaba una y otra vez los errores en la línea de creación del conjunto que prepara Mena, que apenas pasó del centro del campo con peligro en el inicio del encuentro. Alejandro, por contra, tuvo que salir un par de veces a las inmediaciones del área para cortar el avance de los locales, que llevaban peligro por la banda izquierda y cada vez que había una jugada a balón parado aunque sin crear ocasiones claras.

Era más dominio que asedio hasta que en el minuto 13 se rompía el equilibrio con el 1-0, obra de Diego tras recoger un rechace en el área visitante después de un saque de esquina. Los industrialistas protestaron el gol, sobre todo Alejandro, que se quejó de un empujón en el área pequeña de Steve. Pérez Guerrero solventó la situación con amarilla tanto al portero jerezano como a Juanma Carrasco. Fue su primer error pero no el único.

Con el Industrial acusando el golpe, el Villamartín pudo hacer el 2-0 poco después. El equipo local recuperó un balón en el centro del campo y rápidamente buscó la espalda de Manu Macías. El lateral diestro falló en su intento de interceptar el balón, que le llegó a Guerrero. El capitán villamartinense regateó a Alejandro y cuando la grada local cantaba el segundo lanzó incomprensiblemente fuera.

Por fin, el Jerez Industrial se asentó al tiempo que Benítez entraba en juego. A la media hora ya dominaba por completo el juego aunque con poca profundidad. El meta local tuvo que meter la mano en un lanzamiento lejano de Benítez y en el 32' llegó la mejor ocasión de los visitantes, en un remate de cabeza de Riki que se fue rozando el palo derecho de la meta de Alberto. El efecto óptico hizo que la grada cantase el empate. Antes del descanso, Juanma Carrasco protestó un empujón en el área local pero Pérez Guerrero tampoco quiso saber nada esta vez. La segunda mitad comenzó bien distinta y en apenas tres minutos el cuadro industrialista ya había lanzado un par de córners. Benítez se hizo dueño del centro del campo. Se veía venir el gol visitante y llegó en el 53' tras un centro de Benítez que Riki cabeceó al larguero. El rechace le cayó a José Carlos para firmar las tablas.

A partir de ahí vinieron los mejores minutos del Jerez Industrial y Valero tuvo el 1-2 en un mano a mano que culminó estrellando el balón en el cuerpo del portero tras un pase al hueco de Benítez. José Carlos, tras otro centro medido del centrocampista sevillano, remató por encima del larguero. Fue su último acto de servicio antes de ser sustituido por Corral. El Jerez Industrial se fue al ataque pero descuidó la defensa aunque el 2-1, que fue el mazazo definitivo, llegaba en otro saque de esquina. Esta vez Alejandro midió mal y en el segundo palo Lirio remató a placer.

Con casi 25 minutos por delante, el equipo jerezano quemó todas las naves y Costilla entró por Riki. Alberto Orellana se colocó de delantero centro y con más corazón que cabeza, el Jerez Industrial buscó la gesta de la remontada. Juanma Carrasco fue objeto de otro penalti, que esta vez no admitía discusión. Pérez Guerrero de nuevo se hizo el sueco. Y lo que sobrevino fue el 3-1 después de que Costilla quisiera regatear a dos contrarios en su propia área. Sierra le robó el balón y batió por bajo a Alejandro, enterrando de paso las ilusiones de los jerezanos.

La nutrida presencia de aficionados que recorrieron los 50 kilómetros que separan Jerez de Villamartín volvieron con la pena de ver cómo el equipo se quedaba sin opciones de ascenso aunque despidieron al equipo con aplausos después de una gran segunda vuelta.

Villamartín: Alberto, Reina, Acevedo (Pni 55'), Lirio, León, Kilian (Carrillo 63'), Diego (Soria 76'), Steve (Sierra 69'), Dani, Nene y Guerrero.

Jerez Industrial: Alejandro, Manu, Quintero, José Carlos (Corral 69'), Alberto, Juanma, Antonio Benítez, Álex Valero, Riki (Costilla 75'), Juanjo y Juanma Carrasco.

Goles: 1-0 (13') Diego. 1-1 (53') José Carlos. 2-1 (67') Lirio. 3-1 (84') Sierra.

Árbitro: Pérez Guerrero. Amonestó a los locales Acevedo, Diego, Nene y Dani y a los industrialistas Alejandro, Manu Macías, Alberto Orellana, Juanma Carrasco y Antonio Benítez. También amonestó al técnico José Manuel Mena.

Incidencias: Encuentro disputado en el Municipal de Villamartín, con nutrida presencia de aficionados blanquiazules.