El Jerez Industrial logró ante el Bazán su segunda victoria consecutiva en La Juventud con los tantos en la primera parte de Cabello -el punta está en racha- y Juanito Benítez, que se reencontró con el gol varias semanas después. Todo esto ocurrió en una primera mitad más que aceptable de los industrialistas, que sin embargo en la segunda mitad sestearon y perdonaron la goleada a un rival que acudió a La Juventud con catorce jugadores, que no tiró a puerta en los 90 minutos de partido y que, para más inri, acabó el encuentro con el meta suplente Barón incrustado en el centro del campo al tener que suplir al lesionado Aparicio, que a su vez había entrado en el minuto 23 sustituyendo a Javi Catalán, también lesionado.

El triunfo deja al Jerez Industrial en la zona templada de la clasificación a cinco puntos de la séptima plaza que da derecho a jugar la próxima temporada en la División de Honor sénior. Poco a poco, los de José Manuel Mena le han ido cogiendo el aire a la competición y suman ya cinco jornadas sin perder en las que logrado dos victorias y tres empates acabando el mes de noviembre sin mácula. El domingo espera el Cádiz B, líder incontestable de la categoría y máximo favorito a dar el salto a Tercera División. Sobre el papel, favorito para el choque ante los industrialistas pero el equipo blanquiazul pasa ahora por su mejor momento de la temporada.

Se pueden extraer datos positivos del cuadro jerezano. Empezando por la defensa, el tándem que forman Alberto Orellana y Juanma Sánchez recuerda ya al de la pasada temporada y el último refuerzo, Juanito, se ha asentado en el lateral derecho. El hispano-colombiano tiene libertad para subir la banda, tiene técnica y además centra a las mil maravillas, una grata noticia para Cabello. Precisamente, el punta está también 'de dulce'. Lleva cinco goles en los cuatro últimos partidos, todos ellos decisivos para que el equipo haya puntuado. El delantero cazó ayer en el segundo palo una falta sacada por Mendoza que Alberto Orellana prolongó con la chepa. Cabello además sabe jugar para el equipo y sirvió dos balones a Juanito Benítez que el atacante no supo aprovechar. Por lo demás, Mendoza es el jugador que más rendimiento está dando al equipo con sus internadas por la izquierda y a la hora de defender es el primero que corre para detrás.

El partido tuvo poca historia porque enfrente el Bazán sólo existió hasta el 1-0 y bajó definitivamente los brazos con el segundo gol que encajó. Hasta entonces, se había mostrado como un equipo ordenado pero sin mordiente de centro del campo hacia adelante. Llegaba con bajas importantes y con sólo tres piezas en el banquillo. Para colmo, Javi Catalán se lesionó mediada la primera mitad y Castañeda tuvo que gastar el primer cambio antes de lo calculado.

Mendoza fabricó la jugada que iba a originar el primer gol. Salió en un regate de la presión de dos contrarios, que sólo le pudieron parar en falta en el pico derecho del área visitante. El propio Mendoza sacó la falta, Juanma y Orellana fueron al remate, el balón tocó en la espalda del central y Cabello, en el segundo palo, cruzó de cabeza al otro palo, haciendo el 1-0. El segundo pudo llegar en una doble ocasión local. Juanito Benítez saca un córner, Orellana remata a bocajarro y el portero envía a saque de esquina como puede. Desde la otra esquina, saca Mendoza y Juanma Sánchez remata por encima del larguero.

No se hizo esperar mucho más el 2-0. En otra jugada de Mendoza por la izquierda, el balón le llegó a Costilla, quien cedió a Juanjo, el centrocampista buscó la portería, un defensa frenó el esférico, que le cayó a Juanito Benítez, con el tiempo suficiente para colocársela y cruzar a la izquierda de Carrillo.

Con el 2-0, el Jerez Industrial contemporizó y el Bazán tampoco arriesgó hasta que en los últimos veinte minutos Castañeda pasó a jugar con defensa de tres obligado también por la lesión de Aparicio. Los jerezanos tuvieron un par de contras muy buenas para haber aumentado la renta. Juanito disparó por encima del larguero tras un gran pase de Borja y Juanito Benítez, después de recibir de Cabello, enfiló la portería contraria y estuvo generoso al ceder a Borja, que llegaba por la derecha absolutamente solo. Sin embargo, el pase no fue preciso y se perdió la oportunidad de hacer el tercero.

En los últimos minutos, el portero suplente Barón tuvo que entrar como jugador de campo jugando el último cuarto de hora en el centro del campo totalmente desnortado. El Industrial tampoco quiso hacer más sangre y se conformó con un triunfo que le da alas antes de visitar la próxima semana al Cádiz B.