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Dos millones de personas exigen en El Cairo la dimisión de Mubarak

  • El ejército se ha mantenido al margen y no ha intervenido centrando su actuación únicamente en el control de los accesos.También hubo protestas en otras ciudades como en Alejandría o Ismaeliya, donde se exigió un nuevo comienzo en Egipto.

Hasta dos millones de personas se  manifestaron este martes pacíficamente en la capital egipcia El Cairo para  exigir la dimisión del presidente Hosni Mubarak.  También hubo protestas en otras ciudades como en Alejandría o  Ismaeliya, donde se exigió un nuevo comienzo en Egipto. 

Al igual que el domingo, cuando el Ejército descartó disparar  contra la multitud, los soldados se mantuvieron al margen y no  intervinieron.  En la céntrica plaza de Tahrir (de la Liberación) se reunieron  trabajadores y médicos así como religiosos, mujeres con niños y  jóvenes. Un reportero de dpa aseguró que se respiraba un ambiente  relajado y casi festivo. "Queremos libertad. Queremos democracia",  coreaban los manifestantes que portaban pancartas con eslóganes como  "Mubarak, desaparece". 

Esta vez había también notablemente más miembros de los Hermanos  Musulmanes entre los manifestantes que en anteriores ocasiones. Esta  organización está oficialmente prohibida en Egipto, pero cuenta con  muchos seguidores y podría participar en un nuevo gobierno formado  por la oposición, lo que ha suscitado temores en Israel.  Representantes de todos los grandes grupos opositores se mostraron  entre tanto dispuestos, tras una reunión celebrada en El Cairo, a  conversar con el vicepresidente Omar Suleiman bajo la condición de  que Mubarak presente su renuncia. 

Los opositores elaboraron tras alcanzar un acuerdo de mínimos una  primera lista de demandas con los cuatro principios que consideran la  base de las negociaciones con la estructura de poder existente y se  la enviaron al vicepresidente, Omar Suleiman.  Sin embargo, la Hermandad Musulmana, el mayor movimiento de  oposición del país, dijo que no negociará con Suleiman. 

El primer item de la lista exige la dimisión del presidente Hosni  Mubarak y su "régimen". En segundo lugar, se pide la formación de una  cúpula transitoria y el establecimiento de un comité que redacte una  nueva Constitución para el país.  Exigieron a su vez la disolución de las dos cámaras parlamentarias  y de los parlamentos regionales y la creación de un "gobierno de  alianza nacional". "Esperamos que el gobierno fije un calendario para  la puesta en práctica de estas exigencias", señalaron.  El Premio Nobel de la Paz y figura opositora Mohammed El Baradei  exigió a Mubarak que presente su dimisión hasta el viernes. A su vez,  se espera la llegada desde Estados Unidos del  Premio Nobel de Física egipcio Ahmed Zuwail, quien tiene intención de  hablar en nombre de la oposición con la cúpula militar.  Por su parte el secretario general de la Liga Árabe, el ex  ministro egipcio de Asuntos Exteriores, Amr Mussa, habló de una nueva  era. Es imposible regresar a la situación previa a las protestas de  hace una semana, apuntó. La oposición ya había barajado hace unos  años a Mussa como posible sucesor de Mubarak. 

De forma paralela a la concentración opositora se reunieron en el  centro de El Cairo unos 2.000 seguidores de Mubarak que gritaban "¡Sí  a Mubarak, no a las manifestaciones y el sabotaje!". De momento no se  han registrado enfrentamientos con los manifestantes  antigubernamentales. 

De acuerdo con la televisión estatal, provocadores estaban  tratando de desencadener enfrentamientos entre manifestantes y  soldados. Éstos últimos, por su parte, repartieron en la plaza de  Tahrir panfletos a la multitud que decían: "Tienen (ustedes) el  derecho a expresar su opinión de forma civilizada". 

El Ejército interceptó al margen de las manifestaciones a  alborotadores y presuntos delincuentes. Además en los accesos a la  plaza de Tahrir agentes de civil y soldados registraban a los  participantes en busca de armas y les pedían la documentación. Muchos  manifestantes alzaban sus documentos de identidad. 

Mientras, las comunicaciones ferroviarias con la capital seguían  bloqueadas por el gobierno para obstaculizar la llegada de  manifestantes desde el interior del país, informó la BBC.  La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi  Pillay, estimó entre tanto la cifra de muertos en las protestas en  Egipto de los últimos días en unas 300 personas y elevó el número de  heridos a otras 3.000, citando reportes no confirmados. 

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