Elena Aguilar, directora de la Compañía de María y rey Gaspar 2015

"Es una experiencia única, te permite ver lo solidario que es Jerez"

  • Para la directora, este nombramiento al centro "ha sido todo un detalle por parte del Ayuntamiento, no lo podremos agradecer como se merece".

Desde hace más de treinta años Elena Aguilar imparte matemáticas en el colegio Compañía de María.Desde hace siete también es la directora, así que hablar de su vida es hablar de aulas, de libros, de educación. El 5 de enero será el Rey Gaspar, nombramiento que viene a reconocer la labor del centro educativo que este año ha cumplido su 125 aniversario. 

–¿Qué sintió cuando conoció el nombramiento?

–Me llamó por teléfonoPepe Arcas, presidente de la Asociación de Reyes Magos. La verdad es que era una cosa que jamás pensé en mi vida que iba a ser para mí.Es que no lo pensé jamás, jamás. Y cuando me lo dijo, mira, ¡qué impresión! Luego vino la ilusión, pero qué impresión más grande. Después me llamó la alcaldesa y Lidia Menacho –delegada de Educación y Juventud– para decirme que por primera vez, alguien del ámbito de la educación ocupaba el puesto de un Rey Mago. Así que encantada.

–El colegio está de aniversario, ¡vaya colofón!

–Desde el primer trimestre hemos recibido cosas, la Medalla de la Ciudad y ahora esto. La gente me para por la calle para felicitarme, lo del Rey Mago es toda una experiencia. Y para el colegio ha sido todo un detalle por parte del Ayuntamiento que no podremos agradecer como se merece. 

–La llamada de teléfono fue en septiembre y desde entonces los meses han sido de locura, ¿no?

–De locura total, aunque desde el principio hemos intentado estar muy organizados. El trabajo que hay detrás de la cabalgata es impresionante y desde luego muy satisfactorio. Todo el mundo sabe que ser Rey Mago implica una serie de obligaciones, pero de verdad es que no te puedes imaginar la cantidad de dinero que hay que recaudar en dos meses, caramelos, juguetes y organización. Es una experiencia única. Te permite conocer a mucha gente y ver lo solidario que es Jerez. También ves cómo tu gente está disponible para lo que se quiera y para cuándo se quiera. Eso se vive en el colegio, por parte de los profesores, de los niños e incluso de los padres. Es algo único.

–Pocas cosas mueven a tantas personas en tan poco tiempo y sin querer nada a cambio...

–Estoy completamente segura. Y además, con la ilusión que lo hace todo el mundo. La gente disfruta con esto una barbaridad.

–En estos días no hay puerta a la que se llame en Jerez en la que no sean bienvenidos.

–Y además te reciben como Reyes Magos, que es otra de las cosas más curiosas de esto. Tú llegas a un sitio y te atienden de forma especial, te sientes que eres el Rey Mago, que estás haciendo algo distinto, es impresionante cómo nos reciben. Con más o con menos, todos dentro de sus posibilidades se vuelcan con la campaña. Ya sea donativo, caramelos, juguetes o cualquier tipo de colaboración. 

–Debe ser muy satisfactorio saber que se está trabajando para regalar juguetes el 5 de enero.

–Pensar que le puedes dar esa alegría a un niño... Creo que todos los adultos ese día pensamos en aquellos pequeños que se han podido quedar sin regalo, eso da muchísima pena. Por eso vamos a intentar llegar a todos, para de verdad estar convencidos de que este año todos van a recibir algo. 

–¿Qué recuerda del día de Reyes cuando era una niña?

–Eso de abrir el cierre de mi casa, en pijama y ver los regalos... ¡Eso no se olvida nunca!  Cada uno tiene seguro esa imagen en su mente. Y recuerdo con especial cariño una casita de muñecas. Una casita de muñecas que a mí  me pareció un bloque de pisos (risas), y de hecho, sigue estando en mi casa.

–¿Sueña ya con ese día?

–A las tres de la mañana se me abren los ojos de pronto pensando en ese día, si estará todo, si nos faltará algo... Se sueña con el 5 de enero y con todo lo que hay que hacer. Es todo, desde que vas a probarte la ropa y dices ‘¡ohh, que esto va en serio!’.

–Sus deseos para el 2015 son...

–Que a través de la educación seamos capaces de formar a los jóvenes para intentar transformar el mundo, que falta nos hace. Intentar hacer ver a estos niños que la felicidad no está en cosas utópicas, sino que está en el diario. Que se puede ser feliz estando uno contento consigo mismo.  

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