El incierto futuro del Teatro Villamarta

Mecenas privados, la última alternativa

  • El gobierno local busca a empresas que patrocinen el teatro para equilibrar sus cuentas. Hacienda reitera que el patronato no puede seguir con déficit.

Los días pasan y el 1 de diciembre se acerca, la fecha límite para encontrar una solución que permita la continuidad de la fundación que gestiona el Teatro Villamarta. Si no se halla, el espacio escénico continuará abierto —no en vano su programación está cerrada hasta junio— pero el órgano que lo regenta desde su reapertura en 1996 pasará a mejor vida. 

 

Ayer, el delegado de Dinamización Cultural y vicepresidente de la Fundación, Francisco Camas, reconoció que aún no han dado  con la fórmula que permita la pervivencia del patronato por lo que se está buscando, in extremis, patrocinadores en el sector privado que se comprometan a aportar el dinero que ayude a equilibrar las cuentas del teatro. Pero el déficit es elevado, unos 700.000 euros según las cifras apuntadas ayer por el responsable municipal, por lo que el objetivo se antoja complicado ante el escaso margen de maniobra. Además, en los últimos años, la iniciativa privada no ha sido precisamente generosa con esta institución, aunque tampoco hubo demasiado interés por explotar esta alternativa.   

Para empezar, el Ministerio de Hacienda ya ha comunicado al Ayuntamiento que no se puede prorrogar la vida del patronato al estar en causa de disolución —el gobierno local había solicitado algo parecido a un ‘indulto’—. Por lo tanto, esta primera posibilidad que había barajado el ejecutivo municipal, aunque con escasas posibilidades de que fructificara, ha quedado rechazada por el peso de la legalidad. Además, se da la circunstancia de que el ejecutivo central no ha flexibilizado la ley que obliga a las entidades locales a tener organismos dependientes saneados. Semanas atrás, los ayuntamientos recibieron una nota explicativa de la aplicación de los últimos cambios normativos pero, en el caso de los organismos dependientes, no se ha movido un ápice. Así, aquellas entidades que no estuvieran en números negros a 31 de diciembre de 2014 se disolverán de manera automática el próximo 1 de diciembre. Esto es lo que le ocurrirá, salvo sorpresa, a la Fundación Teatro Villamarta pues cerró el pasado año con un negativo de 475.000 euros, que se unen a los más de 900.000 euros de 2013. 

 

Ayer, el edil del PPAntonio Montero preguntó al gobierno local sobre sus intenciones para mantener vivo al gestor del referente escénico de la ciudad y la respuesta no aclaró el panorama sino todo lo contrario. “Tenemos un breve plazo de tiempo y seguimos trabajando; estamos intentando recibir aportaciones privadas para equilibrar y continuar con el estatus que tiene”, indicó el edil. Por el momento, no está previsto convocar el patronato, el órgano donde tiene representación todos los partidos, ya que se quiere antes encontrar una solución.

Además, el delegado hizo un análisis rápido y grueso de los motivos que han llevado al Villamarta a ser deficitario. Por ello, incidió en la reducción de las aportaciones de las administraciones públicas (la del Ayuntamiento se ha reducido y la de otras administraciones prácticamente han desaparecido), la falta de patrocinios de empresas privadas, la reducción del número de espectadores por la crisis,  el aumento del IVA cultural y unos mayores gastos en suministros (luz, agua, ...) .  

 

Tras esto, el concejal del PPdefendió su gestión durante el pasado mandato alegando que se puso en marcha un “plan de viabilidad” con el que se consiguieron “abaratar costes en el teatro” . En cambio, el PSOEle echó en cara que durante su gestión se incrementará el número de cesiones gratuitas de estas instalaciones (pasaron de cinco a 14), con el consiguiente aumento del gasto. 

 

Pase lo que pase con la fundación, el edil de Dinamización Cultural aseguró que el Villamarta continuará funcionando. “La programación está definida hasta el año que viene”, afirmó.   

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