Con 22 años al frente del FIT, Pepe Bablé echa la vista atrás para calibrar el prestigio internacional que ha adoptado un encuentro que una vez más ha programado manteniendo su esencia, por el momento, pese al varapalo económico. El encuentro, que arranca hoy, se celebra este año con 430.00 euros, 90.000 euros menos que el pasado, y un 70 por ciento menos que en 2008.

-¿Qué marca la diferencia en el FIT de este año?

-La diferencia es que casi todos los espectáculos son estreno en España, la mayoría de ellos incluso en Europa. Este año, además, vamos a apostar por la innovación, por grandes nombres, pero también por nuevos creadores y gente que viene empujando desde Latinoamérica, además de seguir pujando por la creatividad gaditana. Si el pasado año lo hicimos con Chirigóticas, éste le toca a Eduardo Guerrero, además de contar con las experiencias de los colectivos gaditanos como la Revolución de las Mariposas. Pero pese a las visicitudes económicas, contaremos con la primera producción del FIT de su historia.

-¿Cómo será este espectáculo?

-Es una obra performativa teatral que se hace de la mano de uno de los artistas contemporáneos en alza de Latinoamérica como es Fernando Rubio, y que protagonizan actrices gaditanas. Queríamos hacer algo con gente de Cádiz y cuando lo vi se me encendió la bombilla. Ha estado en 18 países, viene de triunfar de Singapur, Londres y Grecia, y qué mejor que mostrar la pujanza de la creatividad teatral que a través de un espectáculo así.

-¿De qué presupuesto hablamos con respecto a otros años?

-De 430.000 euros, que son 90.000 menos que el año pasado y un 70 por ciento menos desde el año 2008. Es el Festival que tiene el presupuesto más bajo de toda la historia del FIT.

-En cambio, se ha potenciado el Festival de Música Española. ¿Quién deja de apostar?

-Ha sido una tónica general. Concretamente, el INAEM ha aportado 193.500, la Fundación Municipal de Cultura y Ayuntamiento de Cádiz, 161.399, la Junta de Andalucía, 10.000 euros, la AECID 15.000, la Fundación Provincial de Cultura, 7.000 y 20.000 de Iberescena.

-Con este panorama, ¿qué expectativas tiene para el FIT? Objetivos o sueños por cumplir.

-Mi sueño y mayor deseo es que el FIT siga adelante sin perder sus constantes vitales, porque se ha invertido mucho esfuerzo y trabajo de instituciones y de personas, para convertirlo es un acontecimiento con la proyección internacional que actualmente tiene. El FIT nació como escenario activo para la exhibición y difusión del mejor teatro actual latinoamericano, y eso se consigue con recursos; si no, habría que realizarlo eligiendo otro modelo de festival. ¿Cual?, no lo sé. A mí me gusta éste, y éste es el que tiene prestigio y el respaldo de Iberoamérica, y el que consigue que los grupos latinoamericanos vengan con sus pasajes pagados por las instituciones de sus países de origen; porque si invierten es porque el festival les ofrece una plataforma idónea para la proyección de sus realidades escénicas a Europa y al resto de Latinoamérica. Pero esa plataforma hay que mantenerla.

-¿Está entonces el FIT al límite para mantener su esencia?

-Tenemos el mismo presupuesto prácticamente que en 1986, cuando nació. Habría que evaluar lo que se hacía entonces y lo que conseguimos ahora porque las cosas no cuestan igual.

-¿Ha supuesto algo el cambio de gobierno municipal?

-Afortunadamente el apoyo es total y siguen creyendo en la validez de este festival, dentro de sus posibilidades. Estamos en crisis y tenemos que sufrirla. Además, hay un órgano colegiado que es el Patronato con gente de diverso signo político que cree en mí.

-También se puso fin al homenaje del FIT.

-El año pasado ya no hubo y es por cuestiones económicas, pues conlleva hacer un gasto extraordinario. Pero tampoco tenemos por qué tener una obligación y si realmente tenemos que homenajear un día a alguien pues sí lo haremos. Lo que sí hacemos es defender el Premio Atahualpa de Cioppo, que tiene un prestigio y una repercusión en toda Latinoamérica y esto lo tenemos que defender y apoyar otro año más.

-Centrándonos en el programa, ¿qué no puede perderse el espectador?

-Tenemos una programación acorde a lo heterogéneo que es el territorio que nos ocupa. Muchas veces miramos el teatro latinoamericano con los mismos parámetros que el europeo y son distintos. En Europa, más allá de la diferencia lingüística, somos parecidos, cosa que no ocurre en Latinoamérica. Y esa riqueza es la que se van a encontrar los espectadores. Siempre hay un espectáculo para cada apetencia. En el Falla los grandes espectáculos, algunos con intencionalidad crítica o sentido social. Y para ver un teatro más epidérmico nos podemos acercar a las salas pequeñas o espectáculos de calle. Los más mediatizados pueden ser Edu Guerrero, Concha Velasco o Els Joglars, pero en las salas pequeñas hay también grandes nombres de la escena latinoamericana.

-¿Cómo conecta el FIT con el espectador del presente y del futuro, los niños?

-Es una parcela que siempre venimos cuidando. Tenemos varios espectáculos como el de A la sombrita, el de Teloncillo y Azar teatro, donde las funciones para el público general por las tardes se ha programado por la mañana con los colegios. El año pasado vinieron más de 1000 niños con el circo. Este año será en el ECCO y hay problemas de aforo, aunque vendrán unos 200 niños.

-El encuentro de mujeres cumple una cifra redonda.

-Sí son 20 años del Encuentro de Mujeres. Números redondos y números que empiezan a asustar pues el otro día leía que este año el Festival de Música tiene una visión para el tema de la mujeres, que nosotros llevamos 20 años haciendo. Lógicamente, esto tiene su fruto, si el año pasado eran 7 espectáculos con temática de género, este año son 8. Y también vamos a firmar las temporadas de igualdad a través del Ayuntamiento. Somos pioneros.

-¿Para cuándo el FIT en Cádiz?

-El Festival tiene un carácter congresual y convivencial, que es lo que le ha dado prestigio y una impronta especial. Y encontrar un lugar donde albergue todo y que nos daba Tiempo Libre y ahora no lo da el hotel actual es para pensárselo. Pero todo pasa por encontrar el lugar y lo recursos.