La Bienal de Flamenco de 2010, como cualquier otro evento cultural en la ciudad, tiene que hacer frente a la crisis. El espectáculo inaugural, que tradicionalmente era gratuito, ahora es de pago. En marzo pasado, cuando se presentó el cartel de esta edición, el recital previsto en la plaza de San Francisco el 15 de septiembre a cargo del cantaor Miguel Poveda, con el espectáculo Historias de viva voz, era de entrada libre. Ayer Domingo González, director de la Bienal, anunció que traslada su escenario a la Plaza de Toros de la Maestranza. Y que, aunque ahora el concierto sea de pago, las entradas tendrán "precios realmente populares para una función de tal envergadura" -6 euros para las de grada, 20 para los asientos de tendido y 35 para el acceso a las sillas dispuestas sobre el albero.

El cambio de ubicación responde, indicó el director, "a la gran demanda del público", lo que hacía pensar en "posibles problemas de seguridad" para el día del concierto, algo que, dijo, se soluciona en la Maestranza que, además, ofrece un desarrollo "técnico y escénico" más acorde con el proyecto. Finalmente, el nuevo aforo contemplará unas 8.000 localidades, que se podrán adquirir por las vías habituales de esta cita (web de la Bienal, www.generaltickets.com y las taquillas del Lope de Vega) a las que se añade, a partir del 1 de septiembre, las de la plaza.

El cambio, lejos de inquietar al cantaor, es todo un motivo de celebración por llevar a cabo un proyecto, el de inaugurar la cita, que le propusieron hace dos años. "Abrir una Bienal y hacerlo en la Real Maestranza es el sueño de cualquier artista flamenco", por el "vínculo taurino de Sevilla con el flamenco".

Una responsabilidad que Poveda asume realizando un recorrido "completo por el flamenco". La propuesta del cantaor está concebida como un musical que requerirá de la presencia de muchas personas en el escenario y en el que el elemento "más vivo" será la voz. "Se trata de un recorrido por todas las épocas, géneros y voces del flamenco, desde las más desgarradoras a las más laínas", dijo Poveda que cuenta, en esta propuesta, con Nani Paños y Rafael Estévez para diseñar la escenografía "que jugará con todos los recursos que tiene la plaza", indicó Estévez. El proyecto es también una manera de demostrar la "versatilidad de los cantaores flamencos" que, desde antiguo, se acercan "al tango, la copla y otros géneros folclóricos", apuntó Estévez. "Recopilando el material nos damos cuenta de que ya en los años 20 los cantaores eran unos vanguardistas, lo que nos convierte a nosotros en simples seguidores", confesó Poveda.

Una colaboración entre dos representantes de la nueva generación de artistas flamencos que tiene visos de que continúe en gira "en un formato más pequeño". Para el cantaor "es una pena que una obra tan interesante como ésta muera aquí. Aquí muere el toro, pero no nosotros".

Además, el director de la Bienal anunció otros dos cambios: el montaje Paseo por el amor y la muerte, de José Antonio, en el Lope, pasa del 29 al 30 de septiembre, para evitar "problemas técnicos el día de huelga general"; y se incorpora al día 24 la obra 4 ases del flamenco 4 con Bonela hijo, Joselete de Linares, Carmen Ledesma, Paco Moya y El Polaco.