El estudio de Juan Ángel González de la Calle (Jerez, 1956) rebosa creatividad. Está lleno de rincones que tienen casi vida propia, con estanterías animadas por muñecos Clics, recuerdos, fotografías en las paredes, caballetes a modo de monumento, una gran librería ficticia, botes de pintura en el suelo, pinceles esperando su turno en la paleta... Y de observadores, cuadros apoyados en la pared, a cual más sorprendente, retratos del imaginario contemporáneo de De la Calle, expuestos ya en numerosos países.

- ¿Qué proyectos tiene entre mano, literalmente?

- En estos momentos estoy participando en una exposición en Berlín que se llama 'Ningún día sin una línea', en el Freies Museum. Entra dentro de los actos culturales 'España, nuevas culturas urbanas', que tiene distintos apartados como arquitectura, cine, música, diseño, pintura, escultura... Arte español contemporáneo y yo participo con dibujo contemporáneo. Lo organiza el Ministerio de Cultura y la Embajada de España en Alemania. Después de Berlín irá a Seúl. Y también tengo pendientes las Ferias de Londres y de Lisboa, con pintura, que voy en exclusiva con la Galería Estampa. También expondré de manera individual en Algeciras, ciudad a la que le hice el cartel de la feria de este año. Y tengo pendiente editar un libro de artistas. Pensaba que iba a ser un verano tranquilito y ya ves..., va a pasar de todo.

- Le interesa bastante Europa.

- Sí, yo tengo un pie en Europa porque aquí, esta zona..., no da más de sí. De hecho, lo mismo me instalo una temporada en Berlín.

- ¿Cómo es su dibujo contemporáneo?

- Le han llamado allí, en Berlín, el dibujo inmediato porque es algo que hago en la inmediatez en que el dibujo me permite trabajar. Valoro como elemento importante de la obra el tiempo que tardo en hacerla. Una vez que termino, lo escribo en el dibujo y añado así más información: 5, 10, 15 minutos. El tiempo no hace variar el valor de la obra, la obra es la que es, y nada más.

- A usted le gusta sugerir en sus obras, ¿qué exactamente?

- Bueno, yo propongo. Cuando hago una obra trabajo sobre el tema que a mí me interesa trabajar. Pero claro, yo barajo varias posibilidades y ahí surgen otras más que te abren este juego de sugerencias. Presento una imagen de la que estoy contando algo pero que no es definitiva, se presta a más interpretaciones. Me gusta utilizar la ironía, mi obra está llena de sarcasmo y a veces tiene una cierta dosis de mala leche. Detrás de todo esto hay un pensamiento, mi pensamiento, mi forma de ver el mundo, que no es cerrado, es abierto.

- ¿Y cómo se acepta ese pensamiento en España?

- Bueno, creo que se acepta mejor en el extranjero, porque mi pensamiento no es demasiado provinciano. Depende en realidad del nivel cultural de cada país y hay zonas en las que interesa más el arte contemporáneo y la gente va con más frecuencia a las exposiciones, hay mayor sensibilidad. También aquí hay manifestaciones culturales, pero de otro tipo como Semana Santa..., con mucha tradición y como consecuencia quizás hay menos interés por lo contemporáneo. Yo tengo que colocar mi obra donde más aceptación tenga.

- Hace unos años comentaba usted que Jerez pasaba por un buen momento artístico. ¿Sigue pensando igual ahora?

- Creo que entonces sólo quise ser amable. Creo que ha habido momentos en que parecía que la cosa despegaba. Sigo pensando que hay una participación de gente joven que aporta frescura al arte. La plástica en Jerez siempre ha sido bastante rancia y hay muy pocos interesados en cambiar su dinámica. Lo que ocurre es que la mayor parte de estos jóvenes no están aquí y se van a otros sitios donde puedan trabajar. El arte no corresponde a zonas geográficas, es internacional. No tiene sentido llamar a un artista jerezano o gaditano. El artista es artista.

- ¿Qué le parece la oferta expositiva de la ciudad?

- Triste. Creo que lo más interesante lo trae Cajasol, que tiene muy buen nivel. No se pueden realizar los programas sólo con artistas de aquí, aunque obviamente hay que darles su espacio. Yo estaría muy interesado en traer a Jerez arte contemporáneo.

- Hace tiempo que no expone aquí, ¿le gustaría mostrar algo ahora?

- Si hay un proyecto interesante, sí.

- No le faltan los proyectos, ¿le estresa la pintura?

- Bueno, la verdad es que he tenido que rechazar proyectos y esperaba pasar un septiembre tranquilo y ya ves... Pero bueno, busco donde puedo encajar mi trabajo. En algunos momentos puede ser estrasante, pero a mí trabajar bajo presión me inspira, aunque también al arte hay que dejarlo reposar.