Manolo Romero Bejarano

La sillería de La Cartuja

DESDE que en 1908 José Gestoso(1) publicase la autoría del coro de Padres de la Cartuja de Santa María de la Defensión han sido pocos los autores que se han ocupado de este interesante mueble litúrgico, y desde luego ninguno de ellos en profundidad. Esteve Guerrero(2), Camón Aznar(3) y Pomar y Mariscal(4), hacen breves referencias a esta obra y lo que pretendía ser un estudio sobre la cartuja y la sillería de Julia López Campuzano apenas sí trata de manera superficial ambos.

Respecto a los escultores que la labraron, Jerónimo de Valencia y Cristóbal Voisín, tampoco se han publicado grandes aportaciones. Mancheño y Olivares dio a conocer a comienzos del XX el contrato que Voisín firmó para realizar un retablo y la imagen de Nuestra Señora del Rosario para la iglesia de Santa María de Arcos de la Frontera(5). Por este documento sabemos que el escultor era de "nación francés". Además de una referencia documental de Gestoso y algún breve trabajo de Hipólito Sancho(6), poco más se ha escrito sobre este escultor hasta fechas recientes, cuando Jácome y Antón han sacado a la luz un documento que constata que aún vivía en Jerez en 1586. También se sabe que estuvo trabajando en el retablo mayor del jerezano monasterio de Santo Domingo en 1562. En cuanto a Jerónimo de Valencia, además de otra referencia de Gestoso, su presencia en la bibliografía ha sido mayor debido a su participación en la ejecución de la sillería coral de la catedral de Badajoz(7). Por ellas sabemos que tuvo un hijo de su mismo nombre y que continuó trabajando en Extremadura hasta su muerte.

Las primeras referencias que conocemos sobre Jerónimo de Valencia lo sitúan en 1547 trabajando para el retablo mayor de la catedral de Sevilla, sin que sepamos con exactitud en qué consistió su labor. El 6 de septiembre de ese mismo año firma junto a Cristóbal Voisín un contrato con Bernardo Pérez, prior de la Cartuja de Santa María de la Defensión para "hazer de talla un coro de syllas para la yglesia del dicho monesterio conforme a una silla que esta fecha en esta çibdad de sevilla que nosotros propios abemos fecho para muestra de las que abemos de hazer". La importancia del encargo queda clara por el precio en que se concierta cada sitial, diez mil maravedíes, una verdadera fortuna para la época, más "una casa de morada donde nos los dichos maestros geronimo de valençia e christoval bausin e nuestras mugeres estemos syn nos llebar alquyler ny Renta". A cambio la cartuja les exigía exclusividad, pues en el contrato los maestros se obligaban a que "durante el tienpo que durare la dicha obra de faser no tomaremos a cargo otra obra nynguna ny nos encargaremos de ella fasta aber acabado de faser todo". La solvencia de los maestros queda patente en el contrato, pues actúan como fiadores del mismo "martyn de gainça maestro mayor de canteria en la santa yglesia de esta çibdad de sevylla e alonso Ruys maestro de carpinteria de la dicha santa yglesia". Que dos artífices tan importantes del momento avalen el trabajo de los dos entalladores indica que eran conocedores de su profesionalidad. Por desgracia no tenemos noticia de obras ejecutadas por Valencia y Voisín con anterioridad a 1547, por lo que de momento quedarán en la incógnita los trabajos que les confirieron ese prestigio.

El contrato es un tanto parco en condiciones técnicas. No se dice el número exacto de sitiales, ni siquiera las dimensiones exactas de cada uno de ellos, pues se especifica, con respecto a la muestra "sy en las dichas syllas quysierdes vos los dichos bernardo perez prior e don fray pedro pacheco y el dicho conbento de la cartuxa alçar o abaxar o ensanchar o ensangostar (SIC.) asy toda la sylla o alguna cosa de particular syn añadir obra que nosotros los dichos maestros seamos obligados e nos obligamos a las fazer a contento de vos". En lo tocante a los aspectos formales la única referencia es la obligación por parte de los maestros de "hazer en las delanteras de las dichas formas en cada una de ellas un serafin e una flor o lo que bos el dicho señor prior o procurador o conbento nos pidierdes que fagamos con sus molduras a la Redonda atezonadas"(8).

Los maestros respetaron el compromiso de no trabajar en otras obras mientras no se concluyese la sillería, y de hecho firmaron otro contrato con el cenobio en 1550 obligándose a hacer dos retablos, un facistol, dos puertas y ciertas mejoras en el coro, como por ejemplo "encima de la puerta del coro de los monjes del dicho monesterio entre las syllas de los dos coros una salutaçion de nuestra señora que a de ser la figura de nuestra señora y del angel e una jarra de açucenas en medio e todo de media talla y encima de dichas salutacion an de facer un alquitrabe e friso e una cornija de la obra de talla de las syllas de dicho coro de los monjes que trabe con las dichas syllas todo de talla entera conforme a las dichas syllas y encima su coronaçion conforme a las syllas y en medio un dios padre y encima del dios padre su remate". Además tenían que hacer "la sylla e catedra del sacerdote en el coro de los monjes que tenga su piedestal de talla del Romano y encima sus alcotores y a la parte de delante de los alcotores por ençima de los mismos alcotores an de facer unos balaustres labrados de talla mejores e mas gruesos que los de las syllas y a la parte del Respaldo a de llevar sus pilares cuadrados y delante de los pilares cuadrados medios balaustres conforme a los de la parte de delante los cuales balaustres resçiban una boveda de lo Romano trasçada como a los dichos maestros les paresçiere e ençima de la dicha boveda por todos tres lados de la banda de afuera coRa su alquitrabe e friso e cornija y ençima su coronasçion y encima de los balaustres en lugar de candelero an de facer unos angeles o niños e por detras de la coronasçion an de facer una linterna q suba alta a manera de asçençario con sus arbotantes y encima su Remate y en el respaldo de la dicha sylla an de facer una figura de la ResuReçion tan grande cuanto Requiera el tablero con dos ombres armados y un sepulcro"(9).

La exclusividad laboral con la cartuja no fue óbice para que Valencia y Voisín se dedicasen a otro tipo de actividad económica durante la realización de la sillería. Jerónimo de Valencia vendió madera para el retablo mayor de la catedral de Sevilla(10) y Cristóbal Voisín formó una compañía con el escultor Pedro de Ocampo y el mercader Hernán Vázquez, para exportar productos a Puerto de Dios, en la actualidad Portobelo, en Panamá.

De hecho no hay constancia de que ambos firmasen ningún contrato para hacer obra escultórica hasta 1552, cuando los trabajos en la cartuja habían de estar concluidos. El 27 de julio del citado año se obligaron a construir "al monesterio prior y frayles e convento de nuestra señora del Rosario de la orden de san geronymo que es fuera e çerca de la villa de bornos e a vos el Reverendo padre fray lorenço de casas prior del dicho monesterio en su nonbre todas las syllas que cupieren en el coro del dicho monesterio que se entienden altas y baxas"(11).

A partir de aquí las carreras de Valencia y Voisín se separaron. Cristóbal Voisín permaneció trabajando en Jerez de la Frontera, ciudad en la que posiblemente muriese después de 1586(12). Jerónimo de Valencia marchó en 1555 a Badajoz para realizar la sillería coral de su catedral. Pese a que mantuvo frecuentes contactos con Jerez, ciudad en la que continuó viviendo su hijo Jerónimo de Valencia, quien también se dedicó a la escultura(13), no tenemos noticias de que Valencia padre regresase nunca a Andalucía, estando documentado por última vez en 1571 contratando la obra de dos andas para la Garrovilla, localidad de la actual provincia de Badajoz.

NOTAS

1. GESTOSO Y PÉREZ, José, Ensayo de un diccionario de los artífices que florecieron en Sevilla desde el s. XIII al XVIII ambos inclusive, Sevilla, La Andalucía Moderna, 1908, tomo III, p. 117.

2. ESTEVE GUERRERO, Manuel, Jerez de la Frontera. Guía Oficial de Arte, Jerez, Jerez Gráfico, 1952, p. 193.

3. CAMÓN AZNAR, José, La escultura y la rejería española del siglo XVI. Tomo XVIII de la colección Summa Artis , Madrid, 1961, p. 263.

4. POMAR RODIL Pablo J. y MARISCAL RODRÍGUEZ, Miguel Ángel, Jerez. Guía artística y monumental, Madrid, Sílex, 2004, pp. 233 y ss.

5. MANCHEÑO Y OLIVARES, Miguel, Curiosidades y antiguallas de Arcos de la Frontera, Arcos de la Frontera, Imprenta El Arcobricense, 1903, pp. 517-521.

6. SANCHO DE SOPRANIS, Hipólito, "Del Viejo Xerez. Historia y Arte. Cristóbal Voisín maestro entallador", El Guadalete, 17 de noviembre de 1932.

7. MÉLIDA ALINARI, José Ramón, Catálogo Monumental y Artístico de la Provincia de Badajoz, Recurso virtual, Digitalización del manuscrito que se conserva en la biblioteca del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, fol. 173-175. El catálogo fue redactado en 1911, aunque nunca llegó a publicarse. RODRÍGUEZ MOÑINO, Antonio, "Hans de Bruxelles y Jerónimo de Valencia" Boletín de seminarios de estudios de arte y arqueología Número XXXI-XXXIII, 1942-43, pp. 121-156.

8. ARCHIVO DE PROTOCOLOS NOTARIALES DE SEVILLA. 1547. Oficio XIX. García de León. Tomo III, Fol. 3439. 6 de septiembre. Citado por GESTOSO y PÉREZ, José, Op. Cit., tomo III, p. 117.

9. ARCHIVO DE PROTOCOLOS NOTARIALES DE JEREZ DE LA FRONTERA (a partir de ahora APNJF). 1550. Oficio XVIII. Simón García Copín. Fol. 202 y ss. Transcrito por HIPÓLITO SANCHO DE SOPRANIS, y publicado sin decir su fuente por LÓPEZ CAMPUZANO, Julia, La iglesia y la sillería coral de la cartuja jerezana, Jerez de la Frontera, Edición de la autora, 1997. pp. 24 y ss.

10. APNJF. 1548. Oficio XII. Martín de la Cruz. Fol. 1340 vto. y ss. 17 de noviembre.

APNJF. 1549. Oficio XII. Martín de la Cruz. Fol. 64 y ss. 8 de enero.

11. APNJF. 1552. Oficio XI. Leonis Álvarez. Fol. 1398 y ss. 27 de julio.

12. APNJF. 1586. Oficio X. Juan Jiménez de Rojas. Fol. 103 vto. y ss. 20 de enero, citado por JÁCOME RUIZ, José y ANTÓN PORTILLO, Jesús, "Apuntes histórico-artísticos de Jerez de la Frontera en los siglos XVI-XVIII (3ª serie)", Revista de Hisoria de Jerez, nº 9, 2002, pp. 101-137.

13. APNJF. 1555. Oficio X. Juan de Carmona. Fol. 405 y ss. 13 de mayo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios