VeíA el otro día un reportaje en el Diario sobre la cantidad de jóvenes y no tan jóvenes que hacían las maletas y se iban a otro país en busca de un futuro que aquí no ven. Escuchando al presidente del Gobierno esta semana en el debate de la nación, lo he comprendido. Cualquiera que aquí vea el futuro complicado querrá mudarse al país que nos ha descrito. Ese país en el que se ha salido de la crisis; con un crecimiento económico que ya quisieran Alemania, Noruega o Dinamarca; que ha sido capaz de aguantar sin rescate (los miles de millones dados a bancos deben ser por aquello de "tú me das cremita, yo te doy cremita" y no para evitar el colapso); y sobre todo, no se han tocado las ayudas sociales, ni recortado salarios ni empeorado los contratos. Ese es el país al que hay que irse, y mi amigo y yo llevamos varios días buscándolo, pero joé, que no terminamos de encontrarlo. Lo que sí nos hemos encontrado ha sido con el informe de Cáritas de Jerez que nos dice que no pueden más, que ya no llegan a cubrir las necesidades que les demandan por falta de recursos. Hasta el Banco de Alimentos está ya usando el cupo de emergencias según el Diario. Esa es la jodida realidad por mucho que las grandes empresas tengan ya mejores beneficios y los bancos ya ganen más dinero. ¿Ganan más los ciudadanos? ¿Tienen acceso los ciudadanos a mejores créditos con los que poder hacer frente a sus necesidades? No diré que algunos están intentando vendernos la versión moderna de Alicia en el país de las maravillas, porque hace tiempo que Alicia salió huyendo de ese país para poder sobrevivir. Ahora algunos hacen de ilusionistas y otros de iluminados que salvarán el mundo pero no nos cuentan cómo está el mundo en cuyo espejo se reflejan.

Claro que oyendo ayer a la vicepresidenta del Gobierno en plan Rey Mago tirando caramelos para todos, me di cuenta de la verdad: estamos en año de elecciones y nos van a dar todo lo que luego nos quitarán. Mi amigo no está de acuerdo, quiere creer que es verdad que la cosa mejora, y no para de repetirme… ¡no seas mal pensado!