Pasarela

De los trajes de marinero a la sencilla camisa blanca

  • Hace 101 años se celebró la anterior comunión de un Príncipe de Asturias, Alfonso, primogénito de Alfonso XIII

Don Felipe, siendo infante e hijo del "Príncipe de España", hizo la primera comunión en la intimidad de la capilla del Palacio de la Zarzuela el día de San Fernando, 30 de mayo, de 1975, a los 7 años. Lucía camisa blanca (marca Mirto) y pantalón corto. Una ceremonia sencilla, como sucedió con sus hermanas, en 1972 (Elena) y 1973 (Cristina).

Don Juan Carlos, príncipe del rey aspirante al trono, don Juan, comulgó junto a su hermano Alfonso en el palacio arzobispal de Lisboa el 5 de enero de 1947, con 9 años, un año antes de que pisara por primera vez España, tras el acuerdo de su padre con Franco. Vestía de marinero, al igual que su hermano.

Para hallar en la historia la primera comunión de un Príncipe de Asturias anterior a la de Leonor hay que remontarse a 101 años atrás. El 10 de mayo de 1914, Alfonso de Borbón, primogénito del rey Alfonso XIII, protagonizaba la ceremonia en el oratorio del salón de tapices del Palacio Real, ante su familia, la corte y "el alto séquito palatinado". El pequeño contaba con 7 años y la misa la ofició una alta instancia de la iglesia española, Luis Alonso Muñoyerro, obispo de Sión (localidad suiza), ante un altar portátil y con una estancia llena de "plantas de ornamentación". Las mujeres presentes llevaban mantilla negra y las niñas, blanca, con el rey y los infantes de levita. Pomposidad, como marcaba el contexto de la época, dentro de la intimidad. Entre los invitados, miembros de la corte, estaban la duquesa de la Conquista, las condesas viudas de los Llanos y de El Puerto de Santa María, los marqueses de la Torrecilla, de Viana y de Borja, el duque de Santo Mauro, el príncipe Pío de Saboya y el general Juan Aznar, último presidente del Gobierno antes de la instauración de la Segunda República. Una profusión de asistentes impensables en estos tiempos, pero aún menor que la del rey niño Alfonso XIII, celebrada en la Capilla del Palacio Real el 23 de junio de 1898, ante todo el Consejo de Ministros. Tenía 12 años recién cumplidos y vestía de cadete del ejército. Su padre, Alfonso XII, hizo la primera comunión en el exilio romano, de manos del papa Pío IX, en junio de 1870, a punto de cumplir 12 años, y como marqués de Covadonga, no como heredero, ante el advenimiento de Amadeo I.

La Princesa de Asturias ha seguido en su ceremonia junto a los compañeros de colegio la línea ya marcada por sus primos: nuevos tiempos también para la eucaristía en la familia del Rey. Froilán fue el primero, en Alcobendas en 2007.

Respecto al anterior Príncipe de Asturias comulgante, su biografía da para muchísimo más. Con una vida dependiente de la enfermedad de la hemofilia (transmitida por vía materna, la reina Victoria Eugenia), falleció en un accidente de tráfico sin importancia en Miami en 1938, víctima de una hemorragia interna. Renunció a sus derechos en el exilio, en 1933, para casarse con la cubana Edelmira Sampedro, de la que se divorció al poco para casarse en segunda nupcias. No podía tener herederos ya que el tratamiento contra la hemofilia lo dejó impotente.

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