La que ha sido bautizada como 'Corrala de la Juventud', situada en la calle Larga, en pleno centro de El Puerto, abrió ayer las puertas del que desde mayo aproximadamente viene siendo el hogar de once familias portuenses. Todas ellas son jóvenes, de no más de 30 años y con más de una decena de menores a su cargo.

Junto a estas familias estuvieron ayer los portavoces de distintas plataformas que les apoyan como son Rafael Portela, portavoz del Foro Social, Rodrigo Romo, portavoz de la Plataforma Por Una Vivienda Digna Ya y Eva Moreno, portavoz de la Plataforma de Afectados Por La Hipoteca.

Durante la mañana los distintos portavoces se hicieron eco de la situación de estas once familias y destacaron que este no es un hecho aislado. Actualmente en El Puerto son alrededor de 90 las familias que están ocupando edificios en varias zonas de la ciudad como son la calle Cruces, la calle Palacios o la avenida del Ejército, entre otras. En total son 240 personas aproximadamente de diversas edades y en diferentes situaciones que no pueden afrontar el alto costo que supone el pago de una hipoteca o alquiler, según ha afirmado Rodrigo Romo, que también reside en una vivienda okupada debido a que el banco le expropió su vivienda.

El edificio está compuesto por dos patios de vecinos, de los que solo se encuentra ocupado el primero, ya que el segundo es inhabitable debido a los numerosos destrozos que han realizado personas ajenas a los vecinos que ahora residen allí. Y es que durante meses, antes de la ocupación, se ha estado colando gente en la finca -propiedad de un banco tras la quiebra de una promotora- para robar material reutilizable como aluminio, enchufes o grifos.

En esta corrala todos los cabezas de familia están desempleados y han sido anteriormente desalojados de sus casas por impago de la hipoteca. Muchos de ellos ya ni siquiera cobran el desempleo y reclaman el acceso de una vivienda social para tener un techo donde poder criar a sus hijos. Además piden tener acceso a los suministros de luz y agua, ya que no a todos les llega de la misma manera el actual suministro de obra con el que cuentan.

En esta circunstancia se encuentra Soledad Lobo, madre soltera con dos hijos a su cargo de corta edad, una de las jóvenes vecinas que residen en este edificio y que fue de las primeras en llevar a cabo la ocupación, siendo detenida por ello en dos ocasiones por usurpación de vivienda. Asegura que nunca pensó verse en esta situación económica, ya que cuenta con años de experiencia trabajando en distintos lugares como Barcelona o Baleares. Actualmente está en el paro y ni la Junta de Andalucía ni el Ayuntamiento le dan soluciones.

Afirma que no duerme tranquila por las noches ya que ella sufrió el desalojo de su anterior vivienda y vive con el miedo de que esto vuelva a suceder y que sus hijos puedan ver esa escena tan dura.

Dado a que este edificio ha sido rehabilitado recientemente, los pisos se encuentran en buen estado. Tienen dos habitaciones, cocina, salón y cuarto de baño pero como es lógico les faltan muchos elementos imprescindibles en una vivienda como son los enchufes. Hay muebles que poco a poco van reuniendo como buenamente pueden o un hornillo para hacer la comida.

Desde el Foro Social, en apoyo a todas estas familias, se ha convocado una concentración para esta noche a las 21:00 horas, que contará con un pequeño recorrido desde el aparcamiento de Pozos Dulces hasta el Parque Calderón, con el objetivo de "mostrar a la ciudadanía y a los visitantes de la ciudad que aparte de playas y el pescaíto frito hay otras realidades que asolan El Puerto", tal y como dijo ayer el portavoz del Foro, Rafael Portela.