La denuncia pública de la plataforma Agua Clara y el colectivo que agrupa a vecinos "afectados por los malos olores" de la depuradora sobre la emisión de gases es "incorrecta", según manifestaron ayer a este medio fuentes de Aqualia, la empresa concesionaria del ciclo integral del agua en la ciudad.

Refiriéndose a las quejas sobre "la calidad del aire" en el entorno de la estación, quisieron "aclarar" que "las emisiones de la depuradora no suponen ningún perjuicio para la salud". "En ningún momento los niveles registrados han supuesto un peligro para la salud pública", precisaron.

"La presencia de olores perceptibles no implica que haya emisiones de gas por encima de índices reglamentarios. La Consejería de Medio Ambiente ratifica en los últimos datos disponibles el cumplimiento de los niveles de calidad del aire. No se ha registrado ningún valor de ácido sulfhídrico en el aire por encima de los niveles que establece la legislación medioambiental", explicaron.

Las mismas fuentes de la empresa indicaron que "Aqualia ha realizado un seguimiento de las mediciones, cuyos informes arrojan resultados negativos con índices 0,0 de gas sulfhídrico en toda la zona de influencia de la estación". "Hemos realizado con la colaboración del Ayuntamiento una acción correctora para mejorar la calidad del aire, que radica en un tratamiento consistente en añadir nitrato cálcico para inhibir el nivel de sulfhídrico y así evitar el mal olor. También hemos trabajado para que el funcionamiento de la planta mejore tras la aportación, gracias al acuerdo existente entre los ayuntamientos de Sanlúcar y Chipiona, de una nueva instalación, una soplante, consiguiendo mayor capacidad de aireación; además de poner en servicio una segunda balsa que ha permitido mejorar el proceso de depuración", añadieron.

Además, apuntaron que las instalaciones de la depuradora "funcionan al aire libre y están sujetas a los efectos de las temperaturas, es decir, el calor, las mareas y los vientos; y en la época estival dan servicio a una población mayor".