A Pedro Ruiz le crecen los enanos. El que fuera alcalde de Puerto Serrano durante más de dos décadas bajo las siglas de Izquierda Unida tiene una tercera causa pendiente con la Justicia. En esta ocasión, la Fiscalía le acusa de diseñar en 2012 "un procedimiento teledirigido de oposición a la Policía Local con el ánimo de beneficiar a su futuro yerno, Raúl García Vázquez".

El Ministerio Público imputa a Ruiz Peralta un delito continuado de prevaricación, por el que solicita la pena de "inhabilitación especial para el cargo de alcalde, teniente de alcalde, concejal y cualquier otro de naturaleza electiva en el ámbito local, autonómico, estatal o europeo por un periodo de 12 años".

Por lo tanto, ya son 43 en total los años de inhabiltación a los que se enfrenta el ex regidor serrano a petición de la Fiscalía, pues a esta última docena hay que añadir los otros 31 años que requirió el Ministerio Público por el caso de la floristería y el caso de los enchufismos, además de los dos y medio de prisión.

Pedro Ruiz tampoco estará solo en esta causa. (Recordemos que Isabel Barrios, su esposa, y Francisco Javier Gómez, alcalde del municipio durante diez meses, se sentaron en el banquillo de los acusados hace tan sólo seis días). Este procedimiento acumula nada menos que once acusados, entre los que se encuentran -además de Pedro Ruiz y su yerno- Enrique Ruiz Escobar, jefe de la Policía Local de Antequera y su también yerno, David González Gijón; el entonces jefe de la Policía Local de Puerto Serrano, Miguel Ángel Cintado Escobar; Francisco Javier Rodríguez Gijón, subinspector de la Policía Local de La Puebla de Cazalla; Juan José Ramírez Perea, jefe de la Policía Local de Osuna, así como varios agentes locales. Fiscalía los acusa, en su mayoría, como cooperadores necesarios de un delito continuado de prevaricación y de un delito de prevaricación, pidiendo la inhabilitación para cargo público por un periodo de tiempo que oscila entre los siete y los diez años.

El escrito de calificación explica que Ruiz Peralta, "prevaliéndose de la posición que ostentaba en calidad de alcalde", diseñó un sistema de oposición a la Policía Local a medida para que dos de las tres plazas que iban a salir fueran adjudicadas "de antemano".

Así, "resulta que de los 344 candidatos de muy distinta procedencia que fueron aceptados para participar en la oposición a Policía Local de Puerto Serrano, aprobaron tres personas": Raúl García Vázquez, el futuro yerno de Pedro Ruiz; David González Gijón, yerno del jefe de la Policía Local de Antequera; y un tercer hombre sobre el que no constan irregularidades en el desarrollo de su examen.

El responsable del cuerpo municipal de seguridad en Antequera, Enrique Ruiz Escobar, "propuso además a uno de los miembros del tribunal, transgrediendo conscientemente los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad que rige el acceso a la función pública".

Para ello le encomendó al también acusado, Miguel Ángel Cintado Escobar, entonces jefe de la Policía Local de Puerto Serrano, que realizase una propuesta de composición del tribunal "con personas de su plena confianza que le permitiesen seguir sus propósitos de que, al menos su yerno, fuese uno de los aprobados con independencia de su méritos y capacidades".

De esta forma, el presidente del tribunal que designó Pedro Ruiz fue el también acusado Francisco Javier Rodríguez Gijón, subinspector de la Policía Local de la Puebla de Cazalla, mientras que los vocales elegidos fueron los procesados Juan José Ramírez Perea, jefe de la Policía Local de Osuna, y tres agentes de Puente Genil, Arriate y Antequera. Además, el secretario del tribunal seleccionado era el propio secretario del Ayuntamiento, Francisco Javier Santos Guzmán.

"La única intención que tenían Pedro Ruiz y Enrique Ruiz con el tribunal que se constituyó no era otra que resultasen aprobados sus respectivos yernos Raúl García Vázquez y David González Gijón", apunta las conclusiones provisionales, donde también se especifica que los miembros de dicho tribunal "solventaron ilegalmente" las incidencias que fueron ocurriendo durante el desarrollo de la oposición.

Por ejemplo, el yerno del jefe de la Policía Local de Antequera no resultó apto en el examen de salto vertical dentro de las pruebas físicas, siendo este ejercicio eliminatorio. Pues bien, a pesar del suspenso continuó opositando.

Por otra parte, el fiscal recoge en su calificación que el aparato de medición empleado "había sido manipulado" por unos de los vocales del tribunal con el objetivo de que se repitiese la prueba de salto a David González Gijón, yerno de su jefe, lo que finalmente sucedió bajo el pretexto de "un ficticio error en el aparato de medición".

"Si hubo irregularidades en las pruebas físicas, más llamativas fueron las de las pruebas del tipo test", se muestra tajante el fiscal del caso, ya que Raúl García Vázquez, el yerno de Ruiz Peralta, "no alcanzó la cifra de 5 puntos (se quedó en un 4,7) y, por tanto, debió ser calificado como no apto" conforme a la normativa establecida. "Ante dicha situación y con la finalidad de que aprobase el novio de la hija del alcalde, por parte del tribunal -previo acuerdo con el secretario del Ayuntamiento- se decidió subir 3 décimas a todos los opositores de manera que Raúl García Vázquez ya obtuvo el 5 necesario para aprobar".

Pero es que además, para poder aprobar el examen de conocimiento era necesario pasar también el caso práctico con una nota como mínimo de 5, "no constando en el expediente la nota que sacaron los dos yernos", apareciendo sólo el resultado final.