El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha reclamado a la Delegación del Gobierno en Madrid que tome "medidas extraordinarias" para detener al pederasta que supuestamente ha cometido varios secuestros en la capital, acabar con el clima de "inseguridad" e "intranquilidad" y "devolver la calle a los niños".

A través de su portavoz, Salvador Victoria, el Ejecutivo madrileño formulaba ayer esta demanda al día siguiente de trascender un posible intento de secuestro de una menor en la localidad de Coslada, al este de la ciudad de Madrid, y unos días después del rapto de una niña en un parque de la calle Torquemada de la capital.

Según Victoria, los padres no están bajando a los hijos a los parques por miedo a lo que pueda ocurrir, por lo que instó a la Delegación a que tome las medidas que hagan falta para poder capturar al "miserable" o miserables responsables de estos sucesos.

La exigencia de medidas extraordinarias para detener al pederasta por parte de la Comunidad de Madrid se producía precisamente horas después de que la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, recomendara no caer en el "alarmismo" porque la investigación policial está siendo "muy minuciosa".

Cifuentes recalcó que la Delegación del Gobierno está recabando la colaboración de todas las administraciones para que agentes de las policías nacional y municipal realicen patrullajes y vigilancia preventiva conjunta "para tranquilizar a los vecinos de la zona".

Además de las investigaciones policiales y judiciales, ha destacado Cifuentes, las actuaciones preventivas incluyen dispositivos policiales de refuerzo de la vigilancia y, de cara al inicio del curso escolar, reuniones con asociaciones de vecinos para recordarles medidas preventivas. Los investigadores buscan al pederasta desde el mes de abril, cuando raptó a una menor en el distrito de Ciudad Lineal de Madrid que luego liberó, narcotizada. Este mismo pederasta secuestró a otra menor en junio, en la misma zona y la liberó también varias horas después.

Años duró la pesadilla de unos 1.400 menores que sufrieron abusos sexuales durante 16 años en la localidad de South Yorkshire (norte de Inglaterra), desde 1997 hasta 2013, a menudo ante la inacción de las autoridades, según un informe divulgado ayer.

El documento fue elaborado por encargo del ayuntamiento de Rotterham, después de que cinco hombres de origen paquistaní fuesen encarcelados en 2010 por explotación sexual de niñas, y señala múltiples fallos de la policía, las autoridades municipales y las agencias de protección de menores.