Álvaro ha sido un comodín para Jesús Mendoza durante gran parte de la temporada y su lesión en Chapín el día que el equipo se medía al Atlético Sanluqueño B le trastocó bastante los planes, tanto por el rendimiento que estaba ofreciendo como por lo que aporta en el vestuario.

El centrocampista, que en muchos encuentros ha jugado de lateral izquierdo, tuvo que parar más de dos meses por culpa de una pubalgia y ahora, en la recta final del campeonato, ha vuelto a competir y ha comenzado a recuperar su mejor versión. De hecho, en Arcos ante el Mazagón fue el autor del primer gol de los azulinos, el que prácticamente les servía para sellar la permanencia. Y con ese momento es con el que se queda a modo de resumen de la temporada el xerecista. "Sentí una gran alegría porque el gol se me estaba resistiendo y ya, tanto mis compañeros como el míster, me estaban dando mucha tralla. Se lo dediqué a Jesús y a mis compañeros por lo que significaba. Mientras duró la racha de seis partidos si ganar lo pasamos muy mal porque nos llovieron los palos por todos lados y casi nadie confiaba en la reacción. Yo nunca tuve dudas, en el vestuario todos sabíamos que era cuestión de tiempo. La pena es que esa racha nos ha privado de estar ahora luchando por metas más altas. A nivel personal, el gol también me ha dado mucha confianza, siempre te viene bien marcar cuando te llevas tanto tiempo lesionado como estuve yo, pierdes chispa y confianza en ti mismo".

Ahora, tras tres victorias seguidas y dos partidos para final de la temporada, Álvaro explica que "tenemos que disfrutar al máximo, los dos encuentros que nos quedan son atractivos, de esos que todo el mundo quiere jugar y ganar. La Roteña es el líder y vendrá buscando los puntos que necesita para ascender y un derbi siempre es un derbi. Queremos sumar el mayor número de puntos para dejar al equipo lo más alto posible en la clasificación. Estamos fuertes y creo que estamos capacitados para poner en apuros al líder, que está haciendo una gran temporada".

El final de Liga relajado en el plano deportivo no se corresponde con el final en el terreno institucional. En el vestuario, según relata el zurdo, todos "somos optimistas. Nadie quiere pensar que estos dos partidos vayan a ser los últimos de la entidad ni mucho menos, todo lo contrario. Esperamos y deseamos que los problemas se solucionen cuanto antes para tener la plantilla cerrada pronto y saber a qué atenernos, que el verano pasado nos confirmaron que íbamos a jugar en La Línea dos días antes. A pesar de las dificultades, hemos formado un gran grupo y hemos pasado un gran año. Todos queremos repetir experiencia. Las adversidades nos han hecho más fuertes y nos han permitido levantarnos en los momentos más complicados, que también han habido".

Álvaro cumple contrato pero "si el club sigue compitiendo, a mí me encantaría seguir si los técnicos cuentan conmigo. La próxima temporada la Primera Andaluza va a ser una de las más complicadas de los últimos años. Han descendido dos filiales fuertes y se han quedado en categoría equipos también importantes y con historia. Nuestra ilusión es la de competir y la de luchar por la meta que esta temporada al final no hemos podido conseguir".