El derbi de La Isla tiene tintes muy diferentes. Por una parte, está el equipo de Antonio Iriondo que ha comenzado la temporada como nadie podía imaginar, ofreciendo un fútbol de alto nivel, puntuando a pesar de las vicisitudes de las bajas en campos tan complicados como Jaén, y entusiasmando a sus aficionados en Bahía Sur. Y por otra, la Balona, que no termina de coger el pulso a la competición. Maneras bien diferentes de comenzar dos recién ascendidos.

Los linenses, que han vivido una semana anormal al haber disputado el pasado miércoles los 45 minutos que le restaban de su partido con el Granada-74, afrontan este compromiso con menos arsenal del habitual, ya que cuatro de sus jugadores se ven forzados a quedarse en casa. Jorge Herrero y González lo harán por sanción, mientras que lo harán por lesión Carlos Guerra, a vueltas con su fascitis plantar, como Coco, a quien una resonancia ha demostrado que no sufre rotura muscular y que por lo tanto podrá volver pronto a estar a disposición del preparador.