Apenas unas horas después de finalizar la temporada del Atlético de Madrid, su gran estrella, Antoine Griezmann, abrió la caja de los truenos para insinuar su salida del club rojiblanco en busca de un lugar que le dé "títulos".

Todo comenzó el lunes, cuando en la cadena francesa TMC declaró sobre su posible marcha al Manchester United: "Es posible -en una escala del 1 al 10-, un 6".

El crack francés, finalista en la última votación por el Balón de Oro, fue ayer más lejos cuando en la presentación de su autobiografía en París dijo: "Hemos terminado terceros, ese era el objetivo, pero los jugadores queremos más".

Según palabras aparecidas en el diario Marca, Griezmann fue más allá al manifestar: "Quiero ganar títulos, he llegado a un punto en el que el juego bonito y marcar goles no es suficiente. Eso se ha acabado. Ganar títulos, eso es lo que voy a buscar ese verano en el momento de decidir mi futuro".

El futbolista francés acabó saltando sobre el césped con una sonrisa el domingo durante la despedida del Atlético de Madrid del Vicente Calderón. Nada hacía presagiar la bomba lanzada por un jugador que es la principal estrella rojiblanca.

No es habitual que un futbolista del Atlético de Madrid lance un desafío de estas características, pues se trata de un club muy atento a las lealtades.

Así lo constató ayer el delantero Fernando Torres, cuando declaró al respecto de Griezmann: "Lo que nosotros queremos es que todos nuestros jugadores se quieran quedar. No que se queden, que se quieran quedar. Lo importante es transmitirles que el Atlético es el mejor sitio para estar, que el club pueda expresarles lo que significa y a partir de ahí es una decisión muy personal".

Griezmann obtuvo en abril una notable mejora de contrato, que prolongó hasta 2023. Según informó la prensa española, pasó a ganar 14 millones de euros anuales, el mayor sueldo jamás pagado por el club español, un esfuerzo sin precedentes en el Atlético.

Su cláusula de rescisión pasó a ser de 200 millones de euros. Naturalmente, nadie va a alcanzar esa cifra, pero un equipo como el Manchester United, finalista de la Liga Europa, sí podría lanzar una oferta más que jugosa.

Sin embargo, de fondo subyace la sanción de FIFA al Atlético de Madrid de no poder fichar jugadores en junio por irregularidades en la contratación de futbolistas menores de edad, una decisión que está recurrida por el club.

Si no prospera tal recurso, sería un enorme quebranto para todo el proyecto de Simeone -quien ya confirmó que se queda otra temporada en el banquillo- no poder contar con su futbolista más poderoso, su gran estrella, un jugador que, de momento, dejó abierta la posibilidad de su marcha.