La primera jornada de entrenos del Gran Premio nocturno de Qatar se saldó con una prometedora actuación de los pilotos españoles, destacando por encima del resto Jorge Lorenzo, en MotoGP, y Héctor Barberá, en 250cc.

Lorenzo se lo puso difícil, muy difícil al vigente campeón, el australiano Casey Stoner, mientras que el italiano Valentino Rossi y el español Daniel Pedrosa sucumbieron por distintos motivos a la presión de sus rivales.

Pese a la baja temperatura del asfalto los principales pilotos se quedaron cerca del récord del circuito qatarí, en el que el auténtico protagonista fue Lorenzo, quien en su primera actuación oficial en MotoGP mantuvo en vilo al campeón mundial hasta el último segundo y por apenas once milésimas de segundo no pudo ser el más rápido de la jornada.

Pero lo más importante no fue ese dato, sino el cómo lo consiguió, ya que el piloto mallorquín -que estrenó un nuevo casco con una leyenda en la parte posterior quizás desconcertante: El piloto con alma espartana- logró dar hasta seis vueltas a un ritmo de carrera espectacular y que sólo pudo igualar el campeón mundial, mientras Pedrosa ni se encontraba en pista, después de embestir por detrás a Valentino Rossi y acabar en el suelo, y el italiano sí se esforzaba por mejorar con sus nuevos neumáticos Bridgestone sin lograr superarse.

En 250cc, Héctor Barberá consiguió la pole provisional tras permanecer casi todos los entrenamientos entre los mejores de la cilindrada, lo mismo que su compatriota Álvaro Bautista, aunque no pudo hasta el último momento doblegar al italiano Mattia Pasini, que fue quien en todo momento marcó el ritmo en el cuarto de litro. Barberá supo sacar todo el provecho a su Aprilia y aunque no batió el récord del circuito sí que pudo colocarse líder de la tabla de tiempos con más de una décima de segundo de ventaja.

Por último, en 125cc, Bradley Smith marcó el mejor tiempo aunque no todo fue un camino de rosas, pues a poco más de tres minutos del final se fue por los suelos. Contaba por entonces con una ventaja de escasamente tres décimas sobre su compatriota Danny Webb y todos los pilotos apuraban al máximo para mejorar. Aún así, nadie fue capaz de rebajar el registro del joven piloto británico. La cruz de la jornada fue para Sergio Gadea, que llegaba con el hombro derecho tocado, se cayó y no pudo marcar tiempo. En cambio, Nicolás Terol se erigió en el mejor español.