Deportes

Punto que sabe a gloria

  • Suma y sigue El Deportivo mantiene la media inglesa, se acerca a la salvación pero no logra salir del descenso Contratiempos Las lesiones marcaron un choque accidentado para el conjunto azulino.

Abonados al empate y al sufrimiento lejos de Chapín. Esta vez el guión no fue el mismo de encuentros anteriores pero el final sí. El Xerez hizo esta vez lo más difícil, darle la vuelta a un marcador adverso, para terminar empatando a dos y pidiendo la hora porque los instantes finales fueron agónicos, tanto por el cansancio de los de Esteban Vigo por el fuerte calor como por el empuje del Salamanca, que quería cerrar el choque con el encuentro. Al final, un puntito y una jornada más sin perder, ocho. Ahora, tocará seguir haciendo de Chapín un fortín.

Los resultados tampoco fueron del todo positivos y los azulinos no salen de la zona de descenso pero se acercan mucho más a ella, y en los dos próximos compromisos, frente a Alavés y Córdoba, se jugará gran parte de sus opciones.

Que haga un calor asfixiante en Salamanca no es normal y quizás por eso el Xerez salió aplatanado y encajó el primer gol del partido casi sin entrar precisamente en calor. A los tres minutos de juego, el siempre incombustible Quique Martín se encargó de sorprender a Porato con un buen lanzamiento desde casi la frontal después de una acción en la que Abel Aguilar no es que le siguiera demasiado bien.

Lo grave del caso es que en el minuto siete pudo haber llegado el 2-0, otra vez con Quique Martín como protagonista. Tras una internada por la derecha de Toti, el balón le cayó al veterano centrocampista, que no se lo pensó dos veces y volvió a probar fortuna desde fuera del área, Porato rechazó su tiro y dejó el balón muerto pero David Rodríguez no llegó y entre el arquero francés y Aythami taparon luego el cuero lo justo para evitar el remate del punta.

Menos mal que los charros tampoco están muy acostumbrados a eso del buen tiempo porque en el minuto doce, las tablas ya estaban en el marcador gracias a Pedro Ríos. El jerezano aprovechó un buen balón en la frontal para batir a Alberto, después de una jugada entre Momo y Viqueira.

Y tras el empate, llegó el control azulino sobre un rival al que le costaba crear y que no se encontraba nada cómodo. En el minuto 26,  una combinación entre Yordi y Momo pudo acabar en gol, pero  el canario no llegó de puro milagro. Poco después se produjo la jugada del 1-2, concretamente en el minuto 36. Pedro Ríos vio perfectamente desmarcado a Redondo y el sevillano, que entraba por su banda, a su vez a Yordi, que se movió con precisión arrastrando a los centrales para meter la cabeza de forma impresionante y superar al meta charro, que nada pudo hacer para detener el remate del xerecista. El centro bien merecía el gol y el isleño no lo desaprovechó para sumar su tanto dieciocho.

Lo grave es que fuera de casa al equipo le cuesta rematar la faena y justo un minuto antes de que el árbitro señalase el final de la primera parte, David Rodríguez empató.

La segunda parte arrancó de forma accidentada para el Xerez, ya que Bajic se tuvo que quedar en la caseta por una brecha que se hizo en la primera parte y Héctor Verdés ocupó su plaza. Poco después Carlos Calvo, tuvo que entrar por Momo, que sufrió un tirón y minutos después Luque sustituyó a Verdés, que sólo pudo estar en el campo apenas veinte minutos. Vigo y Méndez tuvieron que recomponer el equipo sobre la marcha, y Abel Aguilar retrasó su posición hasta el centro de la defensa.

La primera opción buena de ataque para los azulinos la protagonizó Carlos Calvo, que intentó sorprender a Alberto tras dos recortes a la defensa pero el meta estuvo acertado y despejó con apuros su lanzamiento.

Pero ahí se acabó la pegada xerecista en la segunda parte porque el Salamanca tiró de casta y con una afición volcada comenzó a apretar a un Deportivo atrincherado, que se las vio y se las deseó para frenar las acometidas de unos locales que llegaban por todos lados.

Aún así, casi con el balón de óxigeno como ayuda, el cuadro de Esteban tuvo alguna que otra ocasión, como una casi sobre la hora de Pedro Ríos, que estrelló el balón en el poste, aunque el árbitro terminó señalando fuera de juego del jerezano.

El final del encuentro fue un alivio para los xerecistas, que salvaron un punto, aunque también seguro que regresan con el mal sabor de no haberse podido llevar los tres una vez más.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios