El golfista vizcaíno Jon Rahm recuperó algo de terreno perdido en la segunda jornada del Masters, que se disputa esta semana en el histórico recorrido de Augusta National, con un resultado de cuatro golpes bajo el par del campo, tras el +3 del jueves, en una jornada en la que el hasta entonces líder Jordan Spieth firmó una tarjeta de 74, dos impactos sobre el par del campo, para perder su posición de privilegio (140).

Tras el +3 de la primera jornada Rahm debía salir a por todas para no quedarse descolgado. Y lo hizo. Un eagle en el hoyo le dio alas, aunque dos bogeys consecutivos en el 4 y el 5, respectivamente, devolvieron al español a las dudas. Sin embargo, tras varios hoyos cumpliendo al par cuatro birdies entres el 11 y el 16 lo elevaron para terminar con un -4 al final de su recorrido, uno de los mejores ayer en el campo de Augusta, para quedarse en la clasificación con un -1 y un total de 143 golpes, acercándose de nuevo a los puestos de privilegio tras su mal arranque.

Todo lo contrario le pasó a Rafael Cabrera Bello, que si el primer día se colocaba entre los mejores con un -3, colocándose en cuarto lugar, ayer se dio de bruces con el complicado campo del Augusta National con una tarjeta de +4, colocándose en la clasificación con +1 (145). Tras ir alternando bogey con birdie entre los hoyos 2 y 6, dos birdies seguidos lo dejaron en una buena posición para encarar el final del recorrido. Pero se derrumbó. Un doble bogey en el hoyo 11 mermó su moral y otro bogey acto seguido lo dejó tocado, para acabar con dos nuevos bogeys en los dos últimos hoyos para cerrar una jornada aciaga en la que perdió sus opciones.