La primera vez que Carbures despegó se dio de bruces contra el suelo. Ahora, con la lección aprendida -la cotización del grupo industrial gaditano estuvo meses suspendida por discrepancias con el auditor sobre las cuentas-, el objetivo es remontar el vuelo con la ayuda de Borja Martínez-Laredo, nuevo consejero delegado y ex director del banco UBS en España, al que el consejo de administración le ha encargado liderar la "nueva fase de maduración empresarial" y el "crecimiento industrial".

La presentación del nuevo CEO se realizó ayer en Carbures Airport, la planta aeronáutica que la firma tiene en Jerez, donde el presidente de Carbures, Rafael Contreras, explicó que Martínez-Laredo tendrá como principales cometidos "contribuir al crecimiento a través del acceso de la compañía a nuevos mercados de capital de primer orden, tanto nacionales como internacionales, y afianzar las alianzas estratégicas o acuerdos de fabricación con grandes grupos industriales, especialmente en el sector de la automoción".

La spin off nacida en la Universidad de Cádiz entiende que el sector aeronáutico está ya suficientemente afianzado, por lo que Martínez-Laredo detalló que la nueva etapase centrará en el desarrollo de las áreas vinculadas a los sectores de la movilidad (mobility) y de la obra civil (infraestructuras), a la que renunció en su día para reflotar la empresa.

"Soy consciente de la dificultad de dirigir una empresa de más de 1.000 empleados que con su esfuerzo, dedicación y profesionalidad han llevado a Carbures a ser líder mundial en la fabricación de piezas de fibra de carbono", dijo el consejero delegado, quien añadió que "Carbures es una historia de éxito de una empresa orgullosa de ser andaluza, que hoy tiene 18 plantas de fabricación y diseño en siete países y tres continentes".

Para Martínez-Laredo, "la realidad industrial de Carbures es incuestionable, pero el futuro es aún mejor" y "ese futuro pasa por la construcción y por un mundo más sostenible", ideal que casa con "los valores de la compañía, que siempre se ha caracterizado por su innovación, cumplimiento, actividad y ética".

El nuevo CEO incidió en que sus esfuerzos se centrarán en la puesta en marcha de los nuevos departamentos de mobility, enfocado a la obtención de transportes menos pesados y que emitan menos CO₂, e infraestructuras y obra civil, pero sin olvidar la aeronáutica, "que nos ha dado muchas alegrías y nos dará muchas más".

Contreras recordó que al margen de la colaboración de Carbures en proyectos como la construcción de la primera cápsula de pasajeros del tren bala Hyperloop promovido por Elon Musk o en la fabricación del primer tren de fibra de carbono en Alemania en el consorcio germano-chino CG Rail, la compañía ha ampliado su campo de acción a través del sector del oil and gas, en concreto con el desarrollo de piezas de fibra de carbono para plataformas off shore de la firma Pemex en México. Según Contreras, "ésta es una compañía que está en los principales proyectos del mundo" y "su magia" reside en "su capacidad tecnológica de aplicación de nuevos materiales en todos los aspectos de la vida".

El presidente de Carbures recurrió a las cuentas de la empresa para significar su evolución, que de una facturación de seis millones de las antiguas pesetas en 1999 ha pasado a los 72,3 millones del último ejercicio, en el que, según el nuevo consejero delegado, los ingresos de la compañía crecieron un 10%. Redujo sus pérdidas a la mitad, al pasar de 20 a 10 millones en un año, pero arrastra un pasivo de 160 millones, tras reducir un 20% su deuda a largo plazo -de 68 a 55 millones- y duplicar la deuda a corto plazo -de 36 a 70,5 millones-.