Los hoteleros esperan ocupaciones superiores al 90% en las próximas vacaciones de Semana Santa, que prevén que serán mejores que las del año pasado, que ya fueron de récord, según la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat).

El presidente de la patronal, Juan Molas, ha señalado hoy que los destinos más demandados como Andalucía, Baleares, Canarias, la Costa de Levante y las ciudades de tradición religiosa, alcanzarán una ocupación en los días centrales de Semana Santa superior al 90 %.

La ocupación puede incluso superar el 92% en lugares como Valencia, Benidorm, Barcelona, Sevilla, Granada, la Costa del Sol, Tenerife, Fuerteventura, Lanzarote e Ibiza, entre otros, ha indicado.

La Semana Santa también será buena para el turismo de nieve, que vive su mejor temporada de invierno en los últimos diez años, al sobrepasar el 80% de ocupación en las principales estaciones de esquí con capacidad hotelera como Baqueira, Sierra Nevada, Masella, La Molina, Formigal, Candanchú o Astún, entre otras, ha agregado.

Molas ha destacado que la contratación para cubrir los puestos de trabajo adicionales que genera la Semana Santa asciende a 145.000 empleos, de los que 130.000 corresponden al área de servicios y de ellos 117.000, al sector de alojamiento y hostelería, de acuerdo con datos de Adecco.

Las buenas expectativas para la Semana Santa se extienden a toda la temporada media, entre abril y mediados de julio, ya que no sólo crece la demanda, sino también los precios y la rentabilidad del sector hotelero.

En el caso de la demanda extranjera, destaca un incremento del 8% en las reservas efectuadas hasta la fecha para el periodo en los principales mercados emisores hacia España como el británico, alemán y francés.

Para el presidente de Cehat, estos datos demuestran que España mantiene su competitividad como destino y puede llegar a una rentabilidad similar a la de los años previos a la crisis, pese a la mejora de los resultados de sus competidores del Mediterráneo, que como Grecia ha aumentado un 40 % sus reservas para el próximo verano, aunque lo ha hecho a base de bajar los precios.

También se están recuperando Túnez y Egipto, que está levantando cabeza a costa del precio, aunque sus resultados aún "no tienen nada que ver" con los de hace unos años.

Según el secretario general de Cehat, Ramón Estalella, la mejor noticia de estos datos es la constatación del aumento de pernoctaciones y rentabilidad fuera de la temporada alta, dado que el gran reto del turismo español sigue siendo disminuir la estacionalidad.

Otra preocupación del sector es la economía colaborativa y la proliferación de viviendas de uso turístico ilegales, aunque Estalella confía en que dicha actividad se vaya regulando y normalizando con el tiempo.

A esto se suma otra nueva inquietud, la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Aunque Molas considera que el Bréxit no afectará este año al turismo español ni, probablemente, tampoco el siguiente, pide precaución: "Ya tenemos que ir con cuidadito y sobre todo con precaución, inteligencia, buena voluntad y con mano izquierda", teniendo en cuenta que España recibe 18 millones de turistas británicos al año, al ser el destino elegido por el 40% del total de los que viajan fuera del país.

Dada la relevancia del mercado británico para el turismo español, los hoteleros reclaman al Gobierno que España forme parte del 'pool' de posibles países que negocien con el Reino Unido su desconexión de Europa, para defender al sector, ya que previsiblemente se considerarán prioritarios otros ámbitos como el industrial o el financiero.

En esas circunstancias, la promoción turística de España adquiere aún mayor importancia, por lo que los hoteleros no entienden el recorte de la partida presupuestaria destinada al turismo en 2017, sobre todo del 11 % en la de Turespaña, que Molas tacha de grotesco" e "impropio" para el sector que más ha tirado de la economía del país en su recuperación de la crisis.