El precio del litro de gasóleo se ha encarecido en lo que va de año un 7,8 % (el 3 % en la última semana), hasta alcanzar 1,271,24 euros, con lo que iguala al precio de la gasolina de 95 octanos y rompe la tendencia de los dos últimos años, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.

El gasóleo ha alcanzado con esta cifra el mayor precio del año, aunque todavía es inferior en un 4,36 % al máximo del 14 de julio de 2008, cuando se vendió a 1,329 euros por litro.

Por su parte, la gasolina, que ha subido un 1,2 % desde comienzos de 2011 tiene un precio de 1,271,24 euros, el mismo que el gasóleo, aunque queda por debajo del máximo de 1,276 euros por litro de junio de 2008. Con respecto a la misma semana de 2011, el precio de ambos combustibles se ha incrementado un 28,7 % en el caso del gasóleo, y el 15,76 % en el caso de la gasolina.

En comparación con enero pasado, el gasóleo se ha encarecido un 4,44%, mientras que la gasolina ha bajado el 0,9 %. No obstante, y a pesar del incremento de los precios en España, los carburantes continúan de media más baratos que en la Europa de los 27 y de la de los 16, o zona del euro.

Así, la gasolina sin plomo de 95 octanos cuesta en la UE-27 1,447 euros por litro y en la UE-16 se paga a 1,453 euros, en tanto que el precio del gasóleo de automoción es de 1,338 euros y de 1,320 euros, respectivamente.

Esta diferencia se explica, fundamentalmente, por el peso de los impuestos en España, que representan prácticamente la mitad del precio de estos combustibles, según la patronal Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP).

Así, la subida de los impuestos especiales (II.EE) de la gasolina y del gasóleo de 2,9 céntimos el litro que entró en vigor el 13 de junio de 2009 y el incremento del IVA del 16 al 18 % aprobado en julio del pasado año, han sido determinantes para que el precio de estos combustibles se incremente en las últimas semanas.

No obstante, España es uno de los países de la UE que menos grava los carburantes, lista que lideran el Reino Unido y Holanda en el caso de la gasolina y el Reino Unido y Alemania en el gasóleo.