i+d+I

Más de 750 'ni-nis' luchan por 105 plazas de apoyo a la investigación

  • Empleo público. La UMA prevé que los seleccionados en la convocatoria de fomento del empleo juvenil firmen en mayo los contratos y se incorporen a sus puestos el 1 de junio

Detalle del trabajo que se realiza en un laboratorio de la Universidad de Málaga.

Detalle del trabajo que se realiza en un laboratorio de la Universidad de Málaga.

Más de 750 titulados de menos de 30 años aspiran a una de las 105 plazas de apoyo a la investigación convocadas el pasado 7 de abril por la Universidad de Málaga (UMA), a través de un programa financiado por el Fondo Social Europeo y, en menor medida por la Junta de Andalucía, para promover la empleabilidad de los jóvenes que una vez concluidos los estudios no han conseguido acceder al mercado laboral.

La convocatoria comprendía 82 plazas para universitarios, 15 para titulados en formación profesional de grado superior y ocho para los procedentes de ciclos de grado medio. De acuerdo con los criterios del programa operativo de empleo juvenil 2014-2020, que se desarrolla a través del Fondo Social Europeo, los candidatos tienen necesariamente que estar inscritos en el Sistema Nacional de Garantía Juvenil, no haber desempeñado en su trayectoria profesional más de año y medio de prácticas, no estar estudiando justo antes de esta oferta de empleo ni trabajando. Es decir, es un programa específico para ni-nis porque deja fuera a quienes tuvieran un trabajo, aún cuando fuese precario y ajeno a su ámbito formativo, y a aquellos estudiantes que terminada su titulación decidieron seguir su formación. Estas circunstancias son la que previsiblemente explican por qué aunque la cifra de aspirantes es importante no es masiva. Solo hay que tener en cuenta, por ejemplo, que el hotel Don Carlos de Marbella recibió en febrero más de 2.000 solicitudes para 150 empleos de temporada que no requerían alta cualificación.

La Universidad de Málaga ha registrado solicitudes procedentes de todo el país

Aunque estos puestos de trabajo tienen la consideración de contratos en prácticas, su remuneración viene marcada por las especificaciones del Fondo Social Europeo, de modo que las asignaciones son sustancialmente superiores a las habituales. En este sentido, la convocatoria recoge que el sueldo bruto anual, incluidas las cotizaciones patronales, para los titulados superiores es de 31.335 euros al año, cantidad que se reduce a 25.934 euros para los universitarios de las antiguas carreras de ciclo medio. Las retribuciones para los titulados de los ciclos formativos de grado superior ascienden a 21.918 euros y a 17.092 euros en el caso de los procedentes de grado medio. El plazo para presentar solicitudes concluyó el pasado 25 de abril, si bien ayer seguían llegando a la Universidad de Málaga solicitudes entregadas en otros registros. El vicegerente de Gestión de la Investigación, Jesús Bonill, ha precisado que la convocatoria ha atraído aspirantes de numerosos puntos de la geografía nacional.

Otra de las particularidades de esta oferta reside en la distribución homogénea de los puestos de trabajo por áreas de conocimiento. Pese a que la convocatoria para contratar jóvenes con formación pero descolgados del mercado laboral para que apoyen la investigación universitaria se tuvo que preparar con solo una semana de antelación, fue suficiente para realizar un sondeo entre los grupos científicos e institutos universitarios para calibrar las necesidades. En este sentido, han sido los propios equipos los que han definido las necesidades.

La Universidad de Málaga tiene previsto publicar el próximo martes, 2 de mayo, el listado de los candidatos admitidos y la propuesta de adjudicación de los puestos laborales. En este sentido, hay que tener en cuenta que cada uno de los 750 solicitantes opta a una media de cuatro plazas, por lo que en conjunto se han registrado en torno a 3.000 solicitudes. Una comisión de evaluación analizará y baremará las peticiones teniendo en cuenta en expediente académico de los candidatos. En caso de empate se beneficiará al aspirante que esté más próximo a cumplir los 30 años.

La intención es que los seleccionados puedan firmar el contrato laboral a lo largo del mes de mayo e incorporarse a su empleo el 1 de junio. Otra de las características del programa es que está sujeto al control externo. En este sentido, se espera que auditores de Bruselas auditen tanto las condiciones salariales y laborales como las tareas que se les encomiendan a los jóvenes.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios