-Es su primer festival como delegado de Turismo, Cultura y Fiestas, ¿se ve desde otra perspectiva distinta?

-Sí, por supuesto. Antes lo veía desde una perspectiva privada y ahora lo hago desde una perspectiva, también privada, pero mayoritariamente pública y las cosas son diferentes porque por ejemplo, hay que estar ya pensando en futuro y planificando de cara al próximo año, algo que antes ni me planteaba.

-¿Y se fija uno en detalles que anteriormente no se tenían en cuenta?

-Aquí hay una cosa fundamental, que es la planificación, y la planificación consiste en terminar un festival y empezar vendiendo la siguiente edición y eso es lo que vamos a hacer a partir de ahora pensando ya en el 2013, de hecho ya tenemos las fechas preparadas. Hay algo que este gobierno tiene claro y es que la ciudad debe vender sus eventos con tiempo de antelación, para que los visitantes que quieran venir sepan, con un año vista, las fechas exactas de todos los eventos, desde el Festival pasando por la Fiesta de la Bulería, los Viernes Flamencos o la Semana Santa.

-Después de haber vivido de cerca la evolución de este Festival durante años, ¿cree que tiene todavía margen de mejora?

-Creo que sí, las cosas, de una manera u otra siempre se pueden mejorar. Insisto en que el tema de las fechas es importantísimo porque sabiendo la celebración del mismo con un año de antemano se podrán hacer más cosas, tanto a nivel público como a nivel privado. Este año se ha hecho un programa privado con la participación de la delegación de Juventud y Educación y creo que se ha dado un paso más. Aún así considero que deben implicarse muchas delegaciones y muchas empresas privadas para tratar de aprovechar todavía más el flamenco.

-El flamenco por lo que vemos sigue siendo un pilar desde su delegación....

-Eso es algo que he tenido clarísimo desde el primer momento. Últimamente ha salido en Lonely Planet, una de las publicaciones más importantes a nivel turístico, que Jerez está dentro de las diez ciudades del mundo que todavía tienen mucho que ofrecer, sobre todo a nivel de flamenco y en cuanto a patrimonio histórico-artístico. Eso nos anima a trabajar más en la difusión y comunicación de todos los eventos que vayamos preparando. El flamenco tiene mucho potencial de venta y uno de nuestros retos es hacer actividades entorno a él. El objetivo a largo plazo será la Ciudad del Flamenco, pero antes que eso es conveniente una base previa para que se pueda ir creciendo en otros aspectos.

-Las palabras turismo y festival, ¿van de la mano?

-Son palabras que se dicen muy fácil pero por supuesto entre las dos podemos hacer muchas cosas. Si no haces el Festival no podemos tener turismo. Jerez es un todo pero ese todo no es solamente el Festival de Jerez, tenemos que aprovechar la palabra festival y todo lo que se hace en él para hacer múltiples actividades paralelas que engrandezcan aún más a esta ciudad.

-A pesar de la situación económica que vivimos se han completados los cursos e incluso muchas academias privadas han aumentado el índice de participantes. ¿Qué significa eso?

-Significa que es un producto interesante y que sigue siendo atractivo, a pesar de la situación económica que atravesamos a nivel general.   El flamenco es algo que tiene tirón, y eso lo tenemos clarísimo desde el Ayuntamiento, por eso queremos potenciarlo en la medida de lo posible para que se convierta en uno de los motores económicos de esta ciudad.

-Habla de potenciar el flamenco en Jerez, ¿cuál es la línea a seguir?

-La línea ya la comenzamos el año pasado cambiando por ejemplo los Viernes Flamencos de ubicación. Al principio nos tacharon de incoherentes por aquello de pasar del Astoria al Alcázar pero el tiempo nos ha dado la razón. Es más, algunos compañeros del flamenco me han llegado a decir que en el Alcázar suenan distintas hasta las palmas.  Ahora, el siguiente paso es seguir ampliando el calendario de actividades y nuestra intención a corto plazo es confeccionar un mes de julio atractivo. Sabemos que dentro de la industria turística de la costa hay poca actividad en ese mes, pero entendemos que todas las personas que vengan a Jerez deben tener un abanico de actividades culturales y dentro de ello debe de estar el flamenco.

-Ahora me gustaría que dejase a un lado su cargo político, nos quedamos con Antonio Real ciudadano. ¿Qué prefiere el cante, el toque o el baile?

-Yo soy más de cante, y luego, por este orden, sería de baile y toque. El cante me gusta mucho y disfruto escuchando a la gente de la tierra, a artistas como El Torta, Agujetas o José Mercé, por decir algunos.

-¿Y se atrevería a cantar como hace Obama?

-(Risas) No, como mucho puedo hacer una pataíta, pero lo de cantar que lo hagan los artistas, que lo hacen mejor que yo seguro.

-¿Cree que el jerezano se implica poco con el Festival?

-Creo que poco a poco ha ido creciendo, aunque sí es cierto que es mejorable. Para ello creo que necesitamos hacer una promoción para hacerle ver que este acontecimiento es uno de los más importantes a nivel mundial dentro de su rama. También es cierto que hay que potenciar actividades en la calle para que la gente sienta viva y sea partícipe de lo que está ocurriendo en la ciudad.

La planificación, el método para mejorar

Desde que accedió al cargo como delegado de Turismo, Cultura y Fiestas, Antonio Real (Rota, 1959) ha subrayado el flamenco como factor potencial en una ciudad cada vez más ligada al sector servicios. Trasladar los Viernes Flamencos del Astoria al Alcázar resultó, pese a las críticas iniciales, todo un éxito, y ahora ya trabaja, junto a Antonio Montero, en la planificación de un calendario anual de actividades que contribuyan a convertir a Jerez en la ciudad del flamenco por antonomasia. Conoce perfectamente el perfil del visitante, y sabe lo que viene buscando a la ciudad, una ventaja para comenzar a establecer los parámetros definitivos de esta que llaman la Cuna del Cante y que por un motivo u otro no ha sido capaz de explotar la grandeza que el mundo del arte le ha concedido.