Paz Padilla no tiene vacaciones. Durante el verano continúa al frente de Sálvame. En numerosas ocasiones ha comentado lo difícil que es para ella vivir en Madrid, lejos de su familia y sobre todo de su marido. Por eso aprovecha los fines de semana para viajar hasta Cádiz junto a su hija y su mascota y reunirse con los suyos. El fin de semana pasado estuvo en Zahara de los Atunes y en sus redes sociales ha compartido imágenes de lo bien que se lo ha pasado y lo relajada que ha estado. Al regresar al trabajo sus compañeros han comentado las fotografías en las que la gaditana aparece en bañador y le han llenado de halagos diciendo que está estupenda. Ella ha aprovechado la ocasión para piropear a su marido. "Él si que está bueno, mi marido me trae loca", ha dicho la presentadora que siempre que tiene ocasión dedica palabras de admiración a Antonio Vidal.

Durante su estancia en la playa Paz también ha trabajado. La humorista acaba de abrir un chiringuito llamado El Trompeta Beach en Zahara de los Atunes junto a Luis, uno de sus hermanos. La presentadora se ha reencontrado allí con amigos y familiares y ha supervisado que todo va bien en el local. Este no es el único negocio que ha abierto durante este año. Hace unos meses inauguró en la localidad madrileña de Villaviciosa de Odón un bar llamado Los tuntantes de Villa. Tal es su éxito que durante los primeros días tuvo que cerrarlo porque se había quedado sin existencias.