Los padres de alumnos del colegio público Federico García Lorca han denunciado el estado de "abandono" en el mantenimiento que sufren las instalaciones del centro por parte del Ayuntamiento. Concretamente, la presidenta del Apa, Francisca Pliego y el secretario, Domingo López, señalan que durante los pasados meses de abril, mayo y junio se estuvieron realizando labores de pintura en el edificio de Primaria, "pero se fueron en julio y han dejado el de Infantil sin pintar y con todos los muebles que apilaron los propios profesores para que los pintores pudieran trabajar". El colegio cuenta en la actualidad con unos 450 alumnos de los que 150 son de Infantil. En este sentido, los padres amenazan con que si a principios de curso no están las aulas pintadas, los niños de 3 a 5 años no entrarán en clase, "porque a los mayorcitos se les puede trasladar a otra parte, pero a los pequeños no".

También se quejan de la falta de actuación policial ante los actos de vandalismo que vienen padeciendo. Concretamente, cuentan que "en algunas ocasiones han saltado por la noche y han hecho fogatas y también están arrojando objetos al interior, como botellas de los grupos de jóvenes que se ponen en la puerta a beber y también piedras y hasta una bicicleta rota. El portero ha avisado a la policía, pero le han dicho que no tienen efectivos para venir y que se meta dentro de la casa".

Debido a estos actos de vandalismo ya se han encontrado también rota una verja de madera que era totalmente nueva.

Otra de las quejas es que el arenero donde juegan los más pequeños se está quedando sin arena porque no la reponen, que el muro de separación con el instituto Asta Regia está inclinado hacia afuera y que el alcantarillado "está totalmente abandonado y atascado porque no se limpia, así que en cuanto caen cuatro gotas se inunda todo".

Los padres aseguran que "desde hace tres años no recibimos un duro para mantenimiento y desde hace cuatro no se hace nada en este sentido". Debido a esta situación, una de las escaleras del patio presenta grietas y otro de los patios se encuentra totalmente cubierto de malas hierbas, "con lo que se convierte en un nido de ratas".

También aseguran que llevan cuatro años solicitando que se pongan dos pivotes ante la entrada para que los coches no aparquen sobre la acera y de esta manera evitar posibles accidentes, "pero no hacen nada".