Frente a una realidad más negra que la de hace tan sólo un mes, confianza en el "potencial" de España y gruesa denuncia del "engaño" de la política económica del Ejecutivo de Zapatero.

En un acto cojunto con los grupos parlamentarios del PP andaluz y extremeño, Rajoy cargó en Sevilla contra Zapatero y su mano derecha económica, Pedro Solbes, por una nueva revisión a la baja de los datos de crecimiento y paro, que empeoran el escenario que el propio Solbes dibujó en diciembre. Se lamentó así Rajoy de que "el 1 de enero entraran en vigor los Presupuestos del Estado", y de que "hoy Solbes modifique todo, en lo que es una demostración del engaño, la improvisación y la falta de criterio".

La superación del deterioro económico pasa, según apuntó, por "generar confianza". "Sin confianza los bancos no prestan, y la gente no consume ni gasta", dijo. Pero si de algo desconfía Rajoy no es del "gran potencial de España" sino del equipo económico del que se ha hecho rodear Zapatero, al que ve "agotado" e incapaz de remontar la crisis.

"La política del Gobierno es la nada, acompañada del engaño -continuó-. Por lo que urge un cambio en el Gobierno y en todo el área económica, que está agotada". "La impresión que muchos tenemos es que no tiene posibilidad alguna de afrontar los graves problemas" de la economía, afirmó.

Su solución quedó comprimida en una de sus frases: "Lo que se necesita es un ejercicio de realismo; que no se engañe más porque sino lo único que se consigue es aumentar la desconfianza,; y que se cambie la política económica, que no puede ser la del gasto indiscriminado sino la de la austeridad".