Los trabajadores de UTE Jerez, la empresa concesionaria del servicio de mantenimiento y conservación del alumbrado público en Jerez de la Frontera, han convocado paros para los próximos días 21, 22 y 23 de febrero por el impago de la nómina de enero después de que la empresa haya anunciado la suspensión del servicio desde marzo.

Según ha explicado el presidente del comité de empresa, Antonio Ortega, la plantilla -que ronda la veintena de empleados- está dispuesta a frenar la convocatoria si en la jornada del jueves cobran su salario, al ser el plazo que le han dado a la concesionaria, "porque en más de 20 años de trabajo nunca ha pasado esto".

Asimismo, Ortega ha indicado que la dirección ya ha comunicado a la Delegación de Infraestructuras del Ayuntamiento jerezano la suspensión del servicio en marzo por los más de 800.000 euros que le adeuda la institución municipal.

No obstante, la plantilla exige el cumplimiento "a rajatabla" del convenio colectivo "porque no podemos permitir trabajar para una empresa que no tenga solvencia". Sin embargo, ya ha advertido que pese a la "profesionalidad" de los trabajadores, los problemas económicos empiezan a resentir desde el verano su labor diaria y a día de hoy "estamos sin material para trabajar".

En la actualidad, esta concesionaria se ocupa del mantenimiento y conservación de hasta 25.000 puntos de luz en las barriadas jerezanas, por lo que confían en poder llegar a un acuerdo y que el alumbrado público "no se vea afectado" y "no sea necesario" llegar a la huelga.

De igual manera, de marcharse finalmente UTE Jerez, el representante de los trabajadores ha aclarado que la plantilla sería absorbida por la Delegación de Infraestructuras a la espera de que otra entidad asuma el servicio.