-Desempleada desde hace dos años, ¿en la ciudad no se crea empleo?

-Nada, aquí en Jerez no hay trabajo. Es complicado buscarlo porque están cerrando muchos comercios y la cosa está bastante mal. No queremos hacernos cargo de la situación, pero está mal. Y no es de ahora, viene de muy atrás. Todo lo que ha dado la Junta de Andalucía antes, ahora lo estamos pagando.

-Sus hijos están estudiando, ¿cómo ven su futuro laboral?

-Tampoco se hacen cargo. Tengo uno de 21 años ya y hombre, los tres lo ven difícil, pero como están estudiando y mamá se lo da todo..., no se dan cuenta. Ella -señala a una de sus hijas que le acompaña- tiene 20 años y nada. Lo van a pasar realmente mal.

-En estos momentos ¿les anima a seguir formándose?

-Yo les animo a que sigan estudiando porque si no hay trabajo para mí, para ellos menos. Y tal como va la cosa, todo se complicará aún más.

-Le veo dando un paseo por el centro, ¿viene a menudo?

-Vengo poco. Y no es porque le falte algo, sino porque lo que no hay es cartera. El centro se está quedando como un museo, todos vienen a mirar y nadie compra.

-¿Cree que su barrio (Agrimensor) tiene cubierto todos los servicios públicos?

-Pues mira, por un lado tengo que decir que hay sitios para que jueguen los niños, por ejemplo, pero están muy dejados. El servicio de limpieza es un mundo y aparte. Nosotros, los vecinos, somos los que barremos la calle, pero por el Ayuntamiento todo está muy dejado.

-¿Sigue la política municipal?

-Sí, conozco lo que se está viviendo en el Ayuntamiento. Creo que no pasa por su mejor momento, pero claro, también se le está echando mucha culpa a esta alcaldesa (María José García-Pelayo) y no. Cuando ha entrado en el Consistorio esta situación ya estaba. Como en materia de empleo, esto no es cosa de un día para otro, sino que lo del Ayuntamiento viene de Pedro Pacheco.

-¿Qué mensaje le trasladaría a la alcaldesa?

-Yo le daría ánimos para que siga luchando para hacer cosas por Jerez. Le daría ánimos porque la cosa está complicada y en el Ayuntamiento más. A ella (la alcaldesa) se le tiene que quitar hasta el sueño, igual que a mí, porque las deudas de Acasa, limpieza, autobús... Lo tiene que estar pasando mal.