"Será muy duro volver. Volver ver su sitio vacío, o no disfrutar de ella cuando entraba con tanta alegría por la puerta. Es que no me lo creo, no nos lo creemos". Con estas palabras resumió ayer un compañero de Miriam Tamayo el sentir de sus amigos de clase. Alumna de la Escuela de Hostelería, la joven se dirigía ayer al mediodía a celebrar junto a sus compañeros una especie de despedida de curso. "Cambiábamos de profesor y habíamos montado una pequeña fiesta. Cada uno tenía que llevar comida y nos resultó raro que tardara tanto tiempo en llegar", recordó una de sus amigas de clase, quien añadió que "yo soy de fuera y fue mi primera amiga aquí". Un grupo de alumnos asistió a la concentración que se convocó ayer a las puertas del Ayuntamiento como acto de repulsa por el asesinato de Miriam. Un centenar de personas se dieron cita en Consistorio y guardaron varios minutos de silencio, sólo rotos por algunas denuncias en voz alta que nada tenían que ver con el motivo de la cita.

Muchos no pudieron aguantar las lágrimas y todos clavaron sus miradas en las pancartas que los compañeros de Miriam desplegaron para recordarla. Mensajes como "mi gitana guapa, nos dejas un vacío en el corazón", "tus compañeros no te olvidan" y "siempre estarás conmigo" se pudieron leer en los carteles que mostraron en la calle. "Era raro que no cogiera el móvil, porque ella siempre está liada con el teléfono. Un alumno de otra clase llegó diciendo que había visto a una joven tirada en el suelo, la describió y en ese momento supimos que era ella. Llamé a su familia y me lo confirmó", relató una de sus amigas. "Nos había dicho que con su exnovio no era feliz. Cuando su bebé tenía dos meses lo dejó porque no era bueno. Sabíamos que pasaba algo muy duro porque ella me contó que le llegó a decir la terrible frase de 'si no eres mía, no serás de nadie'. Es muy duro", añadió la joven. El profesor de Miriam arropó a sus alumnos y dijo que "estamos todos bastantes afectados, pedimos respeto".

Por su parte, la alcaldesa reconoció que "ha sido extremadamente duro. Condenamos desde una misma voz hechos como éste. Vamos a estar con la familia de Miriam para todo lo que necesite". La regidora agradeció el buen trabajo de la Policía y reconoció el comportamiento de esos ciudadanos que "sin conocer a Miriam la defendieron e intentaron salvarla. Demuestran que hay personas buenas en el mundo". El subdelegado de Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, remarcó que "ante cualquier indicio hay que denunciar. Tenemos que tener la esperanza de que no vuelva a ocurrir".