Los problemas económicos del Ayuntamiento han llegado a la concesionaria Sice (Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas) que se encarga de la conservación y mantenimiento de semáforos. Según ha podido saber este medio, el gobierno local debe a la empresa aproximadamente 3 millones de euros. A pesar de esta cuantiosa cantidad, la entidad ha ido "tirando" con los recursos propios, lo que ha permitido que la plantilla no tenga dificultades en los cobros de las nóminas, pero la situación ya ha llegado al límite.

La deuda está provocando que se dejen de prestar algunos trabajos en la ciudad, como reposición de semáforos y pilonas. En concreto, ayer mismo dejó de funcionar la que se encuentra en la entrada de la calle Tornería. A pesar de que "aún no se ha notificado oficialmente", ciertas labores ya se están quedando fuera de la agenda. El temor ahora es que los problemas económicos tengan como consecuencia la reducción de plantilla e incluso la marcha de la empresa, aunque todavía le quedan 4 años de concesión.

La delegada de Seguridad, María del Carmen Martínez, confirmó que "efectivamente hay una deuda pendiente". Además avanzó que "nos estamos poniendo en contacto con la empresa para negociar el sistema de pago".